Las posturas entre los panistas es totalmente opuesta una de la otra, además de que es un debate que no es nuevo: también se planteó hace 9 años

El exhorto legislativo para que el Ayuntamiento de Puebla, que encabeza el edil panista Eduardo Rivera Pérez, suprima cinco juntas auxiliares, evidencia la ruptura de las corrientes panistas en Puebla y la búsqueda de hacerse del control político de las mismas en la capital poblana.

La propuesta que presentó Eduardo Alcántara Montiel, coordinador de la bancada del PAN en la LXI Legislatura, es contraria a la que presentó en 2013 Mario Riestra Piña, entonces coordinador albiazul de la LVIII Legislatura y presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del congreso local, quien creció políticamente gracias al exgobernador Rafael Moreno Valle.

En ese entonces las modificaciones a la Ley Orgánica Municipal establecieron que las juntas auxiliares fueran órganos desconcentrados de los ayuntamientos, y por tanto los ediles subalternos perdieron la función de nombrar a los jefes policiacos de sus comunidades y a seguir manejando el registro civil.

En 2013 se advirtió que la mayoría de las juntas auxiliares eran dominadas por grupos o familias vinculadas al PRI, al PRD y el PT, o por organizaciones vecinales, que escapaban del control del morenovallismo.

Nueve años después y de que las condiciones políticas han cambiado, la propuesta de Alcántara Montiel es un exhorto para que, desde el Código Reglamentario del Municipio de Puebla, en base al artículo 111 se suprima a las juntas auxiliares como órganos desconcentrados de la administración municipal.

De esta manera las juntas auxiliares que se pretende suprimir son La libertad, San Felipe Hueyotlipan, Ignacio Romero Vargas, Ignacio Zaragoza y San Baltazar Campeche en donde dominan las ideologías morenista, priistas y de panistas que seguían a los morenovallistas que hasta hace poco controlaban el PAN en Puebla a través de Genoveva Huerta.

El exhorto de inmediato generó un encontronazo entre Alcántara Montiel y su compañero de partido Rafael Micalco Méndez, quien aseguró que las juntas auxiliares deben fortalecerse y no desaparecerse.

Micalco Méndez dijo que el tema se debe abordar desde una óptica más social que funcional debido a la prevalencia de los usos y costumbres y del reconocimiento de las figuras de ediles auxiliares emanadas del voto popular directo.

El diputado morenista Iván Herrera Villagómez, consideró que los habitantes de esas cinco juntas auxiliares deben ser escuchados para evitar una decisión unilateral, además de señalar que, si bien una consulta ciudadana es un instrumento valioso, debe haber un estudio integral del las 17 juntas auxiliares.

En tanto que los ediles auxiliares recientemente electos mostraron su malestar debido a que no conocen la propuesta de manera directa ni por parte del Congreso local, ni del Ayuntamiento de Puebla por lo que planean realizar una conferencia de medios en los próximos días.

Quienes habitan en esas juntas auxiliares, han sido entrevistados por muestreo en sondeos de varios medios de comunicación, señalando que desconocen el tema, que no le entienden o se molestan porque sienten que se les quitara algo que no saben qué es.

En los medios de comunicación el mensaje tampoco es homogéneo debido a que algunos consideran que se trata de un exhorto que no está sustentando y que es una propuesta que tenía que salir directamente del alcalde de Puebla y no de un legislador.

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