Al reafirmar su interés de competir por la presidencia del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI, Delfina Pozos anunció que, según los plazos que marque la convocatoria, se separará de la dirigencia que asumió de manera transitoria tras la renuncia de Néstor Camarillo.

Dijo que la finalidad es dar transparencia y generar piso parejo en el proceso interno que seguirá el partido para la renovación de la dirigencia, pues la que está en turno concluye el próximo 15 de septiembre.

“Para iniciar el proceso de aspiración a la dirigencia tengo que pedir licencia o renunciar al cargo porque si no, no sería democrático, sería incongruente y estaría faltando a los estatutos del partido. Cuando entramos a una competencia sería ilógico que yo sea juez y parte, no se puede y no sería lo correcto”, dijo.

Comentó que, una vez que solicite licencia o se separe del cargo, la dirigencia nacional del partido nombrará un delegado para dar seguimiento del proceso interno; sin embargo, desconoció quién será el perfile que se designe por el Comité Ejecutivo Nacional.

Delfina Pozos recordó que hay dos métodos para elegir al presidente o presidenta del Comité Directivo Estatal: por Consejo Político y asambleas.

“Tenemos diferentes métodos, eso lo vamos a platicar la siguiente semana, por lo mientras tenemos que darle continuidad a los trabajos que se están haciendo”, dijo, tras mencionar que cual sea el método que se siga, será un proceso transparente y que escuche a los priistas.

La postura de la también diputada del tricolor deriva de la exigencia de algunos sectores del partido para exigir piso parejo y equidad en el proceso interno, tras acusar que, en los últimos cinco años, estuvo “secuestrado” por Néstor Camarillo, con decisiones que perjudicaron a la institución.

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