Es necesario impulsar acciones concretas para proteger al sector femenino, y trascender al hecho histórico de ser la primera legislatura de la paridad de género.
La diputada presidenta de la Comisión de Igual de Género y Contra la Trata de Personas de la LXIII Legislatura, Leticia Hernández Pérez consideró que no es suficiente haber logrado que las mujeres sean mayoría en el Congreso del Estado, sino consolidar y hacerla efectiva esa paridad de género en los temas que se atienden en la agenda legislativa y tener presencia constante en la toma de decisiones, con el propósito de construir acciones afirmativas que beneficien al sector femenino.
En entrevista, la legisladora local comentó que a pesar de que el 60 por ciento de los integrantes de la actual legislatura son mujeres, no es suficiente pues todavía falta mucho por hacer, por lo que el trabajo debe ser constante de parte de las legisladoras y reafirmar ese compromiso con el sector femenino de Tlaxcala.
“Todas las diputadas tienen compromiso, el próximo lunes estaremos trabajando en una ley para prevenir, sancionar, y de ser posible eliminar el delito de feminicidio y es una iniciativa que inició desde las diputadas federales del Partido Acción Nacional y los diputados que están en disposición de impulsar estos trabajos, arrancaremos en Tlaxcala con los foros en temas específicos de prevención, procuración de justicia, información y datos sobre el tema”, adelantó.
Como esas acciones, dijo que es necesario implementar más acciones afirmativas en la presente legislatura, pues no se trata de ejercer la paridad sólo por el número de curules ocupados por mujeres, sino influir en las acciones a favor del sector.
“No se trata solo de una paridad numérica, o de una representación numérica en el Congreso del Estado sino de lo que estamos haciendo las mujeres a favor de nuestras propias mujeres desde donde legislamos», declaró.
El punto –dijo- es que todas impulsen leyes que beneficien a las mujeres de Tlaxcala, y revisar las que existen para localizar resquicios que deban ser atendidos para que los estatutos sean aplicables de manera exitosa y no queden como letra muerta.
Además, “podemos aprovechar, en el buen sentido de la palabra, que tenemos legisladores dispuestos a apoyar el trabajo y las propuestas de las mujeres, de eso no tengo ninguna duda”.