Mi hija detestaba ese ambiente donde la empatía y bondad de dichos profesores era inexistente, al punto de que Fernanda salió llorando de un examen de derecho.
La alumna del ITAM María Fernanda Michua Gantus no se suicidó, sino que murió a causa de un ataque de epilepsia prolongado, afirmó su madre, Fernanda Gantus, quien acusó tratos humillantes de profesores en esa institución educativa.
«La causa de su muerte fue un prolongado ataque de epilepsia que su cuerpo no resistió. Dicho ataque se debió al gran estrés al que se encontraba expuesta por los estudios y a la sensible perdida de su abuela en meses recientes», dijo en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter.
«Fernanda tomó la decisión de estudiar en esa institución por su alto nivel de exigencia académica, ella buscaba ser la mejor y nunca hubiera aceptado que el ITAM redujera su nivel académico; su enojo permanente era la forma burlona y humillante que algunos maestros tenían hacia los alumnos», expresó.
«Desde el primer día la amenazaron con la espada de Damocles de que no llegaría a graduarse. Mi hija detestaba ese ambiente donde la empatía y la bondad de dichos profesores era inexistente, al punto de que en el último día de su vida Fernanda salió llorando de un examen de derecho por la humillación recibida por uno de sus maestros. Esta situación fue un detonante para el ataque que sufrió mi hija», sostuvo.
La mamá de la joven explicó que quiso hacer estas aclaraciones debido a que ha existido demasiado ruido mediático, al cual calificó como inexacto, banal y lejano a lo que pensaba y vivía su hija.
El supuesto suicidio de la estudiante de la Licenciatura en Derecho, el 11 de diciembre, provocó un movimiento de estudiantes que demandan un trato digno en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y también acusaciones de quienes los consideraron poco acostumbrados a las exigencias.
La madre de María Fernanda respaldó el movimiento estudiantil y aconsejó a los jóvenes que no permitan que los degraden de ninguna manera.
«Admiro, apoyo y respeto el movimiento estudiantil que se suscito a causa de la muerte de mi hija y de otros tres compañeros, les suplico a los alumnos en memoria de mi hija y por el cariño que le han profesado que nunca más permitan que los humillen o degraden en ninguna situación en su vida», dijo y exigió respeto por su muerte.
«Sobre lo escrito en las redes sociales sobre si era fifí, rica, mimada o incapaz de soportar la presión no me interesa recibirlo ni tomarlo en cuenta. Mi hija sólo era una mujer rodeada de todo el amor de su madre y familia, y como muchos que carecieron de la presencia de su padre, se esforzó siempre por salir adelante y sus veinte años los vivía a plenitud y feliz», añadió.