Estudio de Hispanics in Philantrophy advierten que hay una red importante en estas tres entidades de captación y explotación de personas con fines laborales y sexuales
Organizaciones civiles han identificado que en los estados de Tlaxcala, Puebla e Hidalgo prevalecen los casos de trata laboral y sexual, explotación de familias de origen indígena o no en trabajos relacionados con la mezclilla, el hogar y la maquila de productos textiles.
El informe «Una mirada desde las organizaciones de la sociedad civil a la trata de personas en México» elaborado por Hispanics in Philantrophy (HIP), una agrupación internacional que asocia una red de fundaciones para realizar inversiones impactantes en la comunidad latina, refiere que la zona centro del país que comprende los estados de Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Morelos, Estado de México, Michoacán e Hidalgo conforman el circuito más importante para la captación y explotación de personas con fines laborales y sexuales.
En particular HIP identifica a Tlaxcala como zona de enganche de víctimas de trata de personas en 35 de sus municipios, y la coloca como el estado dónde llegan víctimas de 16 estados de la república para su traslado a Nueva York, Houston y Atlanta.
Las víctimas de la región Centro son jóvenes de 16 a 22 años y niñas de 10 años, mujeres y hombres indígenas, adolescentes embarazadas o con hijos, jóvenes de 16 a 19 años para la extracción de órganos, migrantes y profesionista en edad de laborar de entre 20 y 35 años.
Además, refiere que la prostitución y el trabajo forzado, las actividades ilícitas para el crimen organizado y la extracción de órganos son los sectores de explotación en esta zona.
Por su parte, en la región Norte (Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Sonora, Sinaloa y Tamaulipas) se localizaron focos rojos de trata con fines de explotación sexual y como zona de enganche por el turismo y el consumo sexual.
En la zona Bajío (Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Jalisco, Zacatecas, Aguascalientes, Colima y Nayarit) se identificó como punto enganche de personas migrantes para el trabajo forzado en los campos agrícolas, sobre todo casos de pornografía infantil y explotación sexual.
Por último, en la zona Sur (Campeche, Chiapas, Tabasco, Guerrero, Veracruz, Yucatán, Quintana Roo y Oaxaca) HIP halló que la trata de personas se ha normalizado debido al cuidado de la imagen pública de esta región turística, provocando mayor invisibilidad del tema.
Sin embargo, las organizaciones identificaron la presencia de grupos de delincuencia organizada y el delito de trata de personas para la siembra y trasiego de droga, desaparición de personas, servidumbre y esclavitud en ámbitos privados como el servicio doméstico.
En esta zona las víctimas son en su mayoría niñas indígenas entre los 10 y 16 años, población LGBTTTI, hombres adolescentes y migrantes obligados a trabajar en servicio doméstico, venta en zonas turísticas, mendicidad forzada, explotación sexual, matrimonio forzado, matrimonio servil y actividades ilícitas para el crimen forzado.
La principal recomendación de HIP es que los gobiernos estatales deben acompañarse con las organizaciones de la sociedad civil que cuentan con diagnósticos sobre las problemáticas, así como promover acciones con perspectiva de derechos humanos.
Hispanics in Philanthrophy es una red de organizaciones civiles, investigadores y líderes para visibilizar, poner en la agenda pública internacional y proponer mejores prácticas para el cambio social de las comunidades latinas. El informe fue presentado y está publicado en la página web del Senado de la República.