La detonación tuvo lugar en la mezquita suní de Guzargah en la ciudad de Herat, cuando el templo estaba lleno de feligreses; entre las víctimas estaba un clérigo cercano al talibán
Una explosión, posiblemente debida a un atentado terrorista, arrasó con una atestada mezquita en la ciudad de Herat, Afganistán, dejando un saldo de al menos 18 muertos y 21 heridos.
El incidente tuvo lugar en la mezquita Guzargah, durante el rezo de mediodía, el punto álgido de la semana religiosa musulmana, cuando los templos están especialmente concurridos.
#Herat #Afghanistan??- At least 18 people killed and 21 wounded in attack following an explosion at the gates of the Guzargah Mosque in #HeratCity, local officials said [?@TajudenSoroush] pic.twitter.com/0VNDEbW1B2
— CyclistAnons (@CyclistAnons) September 2, 2022
Entre los muertos destaca el clérigo Mujib-ul Rahman Ansari, conocido en todo el país por sus críticas a los gobiernos respaldados por Occidente que han regido el país en las últimas décadas. Ansari era considerado próximo al movimiento talibán, que tomó el poder hace un año coincidiendo con la retirada de las fuerzas extranjeras.
Su muerte fue confirmada por el principal vocero del Talibán, Zabihullah Mujahid.
Las ambulancias trasladaron 18 cadáveres y 21 heridos en la explosión a hospitales de la ciudad, dijo Mohammad Daud Mohammadi, un funcionario del centro de ambulancias de Herat.
Nadie se ha atribuido la responsabilidad del ataque, pero el grupo extremista Estado Islámico, ha perpetrado una serie de atentados contra minorías étnicas y religiosas del país, así como contra objetivos talibanes y ha reivindicado en el pasado acciones similares en mezquitas.
La mezquita de Herat atrae a fieles suníes, la corriente dominante del islam en Afganistán, que es también la que profesa el Talibán.
En el año transcurrido desde que el grupo asumió el mando del país, suicidas de Estado Islámico atacaron varias mezquitas durante la oración del viernes, centrándose especialmente en los musulmanes chiíes. Los seguidores de la milicia radical también son suníes y consideran que los chiíes son infieles.