El impacto económico de la pandemia podría borrar los avances logrados en los últimos años por los países pobres, advierte el presidente de la institución.
David Malpass, presidente del Banco Mundial, sostuvo este viernes que la pandemia de coronavirus provocará «una recesión mundial mucho más profunda» que la crisis financiera de 2008 y que podría aniquilar el progreso reciente logrado por los países pobres.
Durante la más reciente reunión semestral del Banco y el FMI, que en esta ocasión se celebró de forma virtual por el covid-19, Malpass aseveró que el planeta se encuentra ante «una crisis sin precedentes, con devastadores efectos sanitarios, económicos y sociales en todo el mundo».
«Nuestras estimaciones sugieren una recesión mundial mucho más profunda que la Gran Recesión, dada la disminución de la producción, la inversión, el empleo y el comercio», advirtió el jefe de la institución.
«Los avances se pueden perder fácilmente»
Malpass sostuvo además que, si bien los efectos trágicos de esta pandemia «se están sintiendo en todo el mundo», la crisis probablemente afectará más a los países y a las personas más pobres y vulnerables.
En este sentido, anunció que el Banco tiene intención de desplegar 160.000 millones de dólares en fondos, durante los próximos 15 meses, hacia los países pobres de Asia, África y América Latina, con el objetivo de fortalecer su respuesta a la crisis de salud y su recuperación económica.
Sin embargo, matizó que «está claro que no será suficiente». «Si no nos movemos rápidamente para fortalecer los sistemas y la resiliencia, los avances en desarrollo de los últimos años se pueden perder fácilmente», aseguró.