En la misiva, compuesta de 63 caracteres, el asesino en serie desafía los intentos por atraparlo tras los múltiples crímenes cometidos a lo largo de la década de 1960.
Es posible que hayas leído o escuchado la noticia de que el agua, ese bien fundamental para el desarrollo de una gran parte de las actividades diarias, ya cotiza en Wall Street. Los inversionistas podrán empezar a negociar con el líquido en una de las entidades más grandes territorial y económicamente hablando de Estados Unidos: California.
Ahora puede que te preguntes, ¿y esto como funciona?
El agua cotizará en el Nasdaq Veles California Water, un índice de referencia establecido para los precios del agua que proporciona mayor transparencia, supervisión y descubrimiento de precios para la industria del agua y sus participantes.
Este indicador está ligado a futuros, que son contratos donde una parte se compromete con otra a la entrega de un activo -que puede ser físico o financiero- en una fecha determinada. En el Nasdaq Veles California Water los involucrados son grupos como municipios, fondos de cobertura o agricultores de California que podrán cubrir el precio de entrega del agua o, caso contrario, protegerse contra la escasez de la misma.
En el caso del agua, los contratos no establecen la entrega física del recurso, sino que se liquidan financieramente.
Por ejemplo: un grupo de agricultores quiere protegerse de los efectos de la sequía en el estado y adquiere futuros en ese índice. Si hay escasez de agua, reciben el dinero estipulado en su contrato para compensar la falta del líquido.
Patrick Wolf, gerente sénior y jefe de desarrollo de productos en Nasdaq, señaló que este índice también servirá para que los agricultores de la entidad se hagan una idea de la fluctuación del precio del agua.
El índice establece un precio al contado de referencia semanal de los derechos de agua en California, respaldado por el promedio ponderado por volumen de los precios de las transacciones en los cinco mercados más grandes y negociados del estado.
El futuro, que entró en vigor el lunes, es el de enero de 2021. Los contratos, que son trimestrales y se extienden hasta 2022, representa 10 acres-pies de agua, es decir, cerca de 3.26 millones de galones (12.34 litros).