El gobierno ruso informó que los pasos fronterizos con China serán cerrados temporalmente desde las 00:00 horas del 31 de enero.
El Gobierno ruso decretó el cierre de sus fronteras con China para prevenir la propagación del nuevo coronavirus que desde diciembre causó 170 muertes y más de 7.700 mil ontagios en el país asiático.
«El correspondiente decreto se ha firmado hoy y ya ha entrado en funcionamiento. Hoy informaremos a todos sobre las medidas pertinentes para cerrar la frontera en la región del Lejano Oriente y otras de las medidas aprobadas por el Gobierno», declaró el primer ministro Mijaíl Mishustin en una reunión del Ejecutivo.
Los dos países comparten una frontera de más de 4 mil kilómetros.
El primer ministro ruso destacó que hasta la fecha en el territorio de Rusia no se ha detectado ni un caso de coronavirus procedente de Wuhan.
«Sin embargo, debemos hacer todo lo posible para defender a nuestros ciudadanos», agregó Mishustin.
Según adelantó el Gobierno en un comunicado, los pasos fronterizos con China serán cerrados temporalmente desde las 00:00 horas del 31 de enero.
La medida será puesta en marcha por el Ministerio de Transporte, el Servicio Federal de Seguridad, Aduanas y la Oficina de Protección al Consumidor.
Emisión del visado a los ciudadanos de China
Desde el Ministerio de Exteriores de Rusia anunciaron la suspensión temporal de la emisión del visado electrónico a los ciudadanos chinos desde este 30 de enero.
«A partir del 30 de enero se suspende provisionalmente la tramitación de los visados electrónicos para los ciudadanos chinos», indicó el organismo en un comunicado.
La Cancillería aconsejó también a los rusos abstenerse de los viajes a China.
«Ante el brote del nuevo coronavirus en China, el Ministerio de Exteriores recomienda a los ciudadanos rusos a no viajar a ese país si no es imprescindible», puntualizó.
A su vez, el Ministerio de Educación prolongó por dos semanas las vacaciones de invierno de los alumnos chinos que estudian en Rusia.
Las vacaciones de dos semanas de duración que concluían los primeros días de febrero, fueron extendidas hasta el 2 de marzo.
Las autoridades chinas informaron el 31 de diciembre de 2019 de un brote de neumonía de origen desconocido en la ciudad de Wuhan.
Más tarde se estableció que la infección es causada por un nuevo tipo de coronavirus, catalogado por los médicos como el 2019-nCoV.
La enfermedad puede transmitirse de persona a persona y es contagiosa sin que haya síntomas durante la fase de incubación, de hasta 14 días.
El 2019-nCoV traspasó las fronteras chinas al confirmarse contagios en una veintena de países, la mayoría asiáticos.