Este sábado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto que establece un arancel del 25% a las importaciones provenientes de México. Justificó esta medida argumentando que el país enfrenta una emergencia debido a la «amenaza extraordinaria» que representan los inmigrantes ilegales y las drogas, incluido el fentanilo.
La Casa Blanca, sede del gobierno de Estados Unidos, divulgó un documento poco después de la firma de la orden ejecutiva firmada por Trump, en el que asevera que “las organizaciones mexicanas de narcotráfico tienen una alianza intolerable con el gobierno de México. El gobierno de México ha proporcionado refugios seguros a los cárteles para que se dediquen a la fabricación y el transporte de narcóticos peligrosos, que en conjunto han provocado la muerte por sobredosis de cientos de miles de víctimas estadunidenses. Esta alianza pone en peligro la seguridad nacional de los Estados Unidos y debemos erradicar la influencia de estos peligrosos cárteles”.
Trump recurrió a la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) para respaldar su decisión de declarar “emergencia nacional” y justificar la imposición de aranceles de 25 por ciento a las importaciones procedentes de México y Canadá —los mayores socios comerciales de Estados Unidos—, excepto al petróleo canadiense, al que fijó un gravamen de diez por ciento, también impuso un arancel de diez por ciento a todas las importaciones procedentes de China. El mandatario firmó la orden ejecutiva en su residencia en Palm Beach, Florida.
Trump decidió diferenciar la tarifa arancelaria a los productos energéticos procedentes de Canadá, país que suministra 60 por ciento del petróleo crudo que Estados Unidos compra del exterior, y cuyo comercio alcanzó casi cien mil millones de dólares en 2023, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos.
En su documento, la Casa Blanca indicó que también hay una creciente presencia de cárteles mexicanos que operan laboratorios de síntesis de fentanilo y nitazeno en Canadá. “Un estudio reciente reconoció la mayor producción interna de fentanilo en Canadá y su creciente presencia en la distribución internacional de narcóticos”, afirmó.
Las órdenes dejan en claro que el flujo de drogas de contrabando, como el fentanilo, a Estados Unidos a través de redes de distribución ilícitas ha creado una emergencia nacional, incluida una crisis de salud pública”, señala el texto difundido por la oficina presidencial de Estados Unidos.
Sobre el tema, agrega que “las autoridades chinas no han tomado las medidas necesarias para frenar el flujo de precursores químicos a cárteles criminales conocidos y acabar con el lavado de dinero por parte de organizaciones criminales transnacionales”.
Utilizar nuestra influencia para garantizar la seguridad de los estadunidenses
La argumentación del gobierno de Trump al hacer formal la aplicación de aranceles a las importaciones de sus países vecinos, sostuvo que “administraciones anteriores no lograron aprovechar al máximo la posición económica de Estados Unidos como herramienta para asegurar nuestras fronteras contra la migración ilegal y combatir el flagelo del fentanilo, y prefirieron dejar que los problemas se agravaran”, reprochó y agregó que “El acceso al mercado estadounidense es un privilegio. Estados Unidos tiene una de las economías más abiertas del mundo y los aranceles promedio más bajos del mundo”.
El texto difundido por la oficina presidencial señala que mientras el comercio representa 67 por ciento del producto interno bruto (PIB) de Canadá, 73 por ciento del PIB de México y 37 por ciento del PIB de China, para Estados Unidos sólo representa 24 por ciento de su PIB. Sin embargo, dijo, en 2023 el déficit comercial de bienes de Estados Unidos fue el más grande del mundo, con más de un billón de dólares.
Los aranceles –afirmó– “son una fuente poderosa y comprobada de influencia para proteger el interés nacional”. Destacó que el presidente Trump “está utilizando las herramientas a su alcance y tomando medidas decisivas que priorizan la seguridad de los estadunidenses y nuestra seguridad nacional”.
El texto de la Casa Blanca afirma que cuando los votantes “eligieron abrumadoramente” a Donald Trump como presidente “le dieron el mandato de cerrar la frontera. Eso es exactamente lo que está haciendo”, justificó y acusó que las políticas de la administración del ex presidente Joe Biden alimentaron la “peor crisis fronteriza en Estados Unidos”.
En ese tenor, dio un listado de datos atribuibles a la administración de Biden. Señaló que durante la gestión de Biden más de diez millones de “inmigrantes ilegales” intentaron ingresar a Estados Unidos, “incluido un número creciente de ciudadanos chinos y personas en la lista de vigilancia terrorista”. Agregó que ese problema no se limita a la frontera sur, sino que los encuentros en la frontera norte con Canadá también están aumentando.
El texto denostó la presencia de personas inmigrantes en Estados Unidos, al sostener que “el flujo constante de inmigrantes ilegales tiene profundas consecuencias en todos los aspectos de nuestra vida nacional: satura nuestras escuelas, reduce nuestros salarios, reduce nuestra oferta de viviendas y aumenta los alquileres, abarrota nuestros hospitales, agota nuestro sistema de bienestar social y causa delitos” “Pandilleros, contrabandistas, traficantes de personas y drogas ilegales y narcóticos de todo tipo están inundando nuestras fronteras y nuestras comunidades”, aseveró.
Indicó que el año fiscal pasado, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detuvo más de 21 mil libras de fentanilo en nuestras fronteras, suficiente fentanilo para matar a más de 4 mil millones de personas. “Se estima que los funcionarios federales solo pueden incautar una fracción del fentanilo contrabandeado a través de la frontera sur”. “Estas drogas matan a decenas de miles de estadunidenses cada año, incluidas 75 mil muertes por año atribuidas solo al fentanilo” .
Cada año mueren más estadunidenses por sobredosis de fentanilo que las vidas estadunidenses perdidas en toda la guerra de Vietnam”, señaló el texto de la Casa Blanca.
Y remató: El presidente Trump prometió en noviembre “firmar todos los documentos necesarios para cobrar a México y Canadá un arancel de 25 por ciento sobre todos los productos que ingresen a los Estados Unidos y sus ridículas fronteras abiertas. ¡Este arancel permanecerá vigente hasta que las drogas, en particular el fentanilo, y todos los inmigrantes ilegales detengan esta invasión de nuestro país”.
Con información de Proceso.