El presunto autor del atentado era originario de Macedonia y habría jurado lealtad a Estado Islámico.


Al menos cuatro personas han muerto en Viena como consecuencia de un atentado perpetrado el lunes por la noche por un «terrorista islamista» de origen macedonio que ya ha sido identificado y que había sido condenado previamente por terrorismo en Austria, según ha informado el ministro del Interior de Austria, Karl Nehammer, en rueda de prensa. Nehammer ha explicado que el presunto autor del atentado ha sido abatido a tiros por agentes de las fuerzas de seguridad austriacas y ha señalado que era «un simpatizante de Estado Islámico». Además, ha contado que no hay señales que apunten a la participación de más personas en el atentado.

El titular de Interior austriaco ha subrayado que las fuerzas de seguridad permanecerán en alerta hasta que los investigadores alcancen una conclusión definitiva sobre si el terrorista abatido actuó solo o no. En su segunda comparecencia ante los medios, Nehammer ha confirmado el balance de cuatro víctimas mortales y 22 personas heridas, varias de ellas con pronóstico grave.

El diario ‘Heute’ eleva a cinco los muertos tras informar de la muerte de un joven que estaba ingresado con heridas graves en un hospital.

EL SOSPECHOSO IDENTIFICADO

Posteriormente, desde el Ministerio del Interior se ha informado de que el sospechoso ha sido identificado como Kujtim F., un joven de 20 años originario de Macedonia del Norte y que también tenía la nacionalidad austriaca. El atacante fue condenado a finales de abril de 2019 por pertenencia a una organización terrorista tras haber sido detenido por tratar de viajar a Siria para unirse a Estado Islámico y fue puesto en libertad condicional a principios de diciembre de ese año, según informa el diario ‘Kronen’.

De acuerdo con este periódico, Kujtim F. había jurado lealtad al nuevo líder de Estado Islámico poco antes de cometer el atentado. El Ministerio del Interior de Macedonia del Norte ha confirmado que Austria ha solicitado información sobre el terrorista abatido, según informa la cadena de televisión local A1.

«La Policía austriaca ha solicitado a través de Europol cooperación e información relevante para este caso y el sector de la cooperación policial internacional está respondiendo», ha señalado el departamento gubernamental macedonio.

En un discurso televisado, el canciller de Austria, Sebastian Kurz, ha condenado el atentado y ha hecho un llamamiento a la unidad de los austriacos frente al odio. «Nunca permitiremos que este odio gane terreno», ha dicho. «Tenemos que ser conscientes de que esto no es un conflicto entre cristianos o musulmanes ni entre austriacos y migrantes», ha señalado. Kurz ha hecho hincapié en que el «enemigo» es el «terrorismo islamista», que «no solo quiere causar muerte y dolor sino que quiere dividir» la sociedad austriaca.

El canciller ha prometido que Austria seguirá defendiendo la democracia, los derechos fundamentales y su estilo de vida liberal. El atentado en Viena tuvo lugar el lunes por la noche y se desarrolló en hasta seis puntos distintos del centro de la ciudad, dejando un primer balance de tres muertos y más una decena de heridos, seis de ellos de carácter grave. Este martes, las autoridades han confirmado la muerte de una mujer que estaba herida grave, con lo que el balance se ha elevado a cuatro víctimas mortales.

Los hechos se produjeron hacia las 20.00 horas, cuando se registraron varios disparos en el área de Seitenstettengasse, aunque hubo otros cinco puntos distintos de la capital afectados por el atentado, que en un primer momento se pensó que tenía como objetivo una sinagoga situada en la zona, pero que estaba cerrada en ese momento.

Según ha contado el alcalde de la ciudad, Michael Ludwig, el sospechoso abatido estaba «muy bien preparado», como demuestra el fusil de asalto semiautomático, la pistola y el machete que llevaba cuando fue neutralizado. Sin embargo, ha puntualizado que el cinturón de explosivos que tenía era falso.

Todo apunta a que el fusil que portaba era un AK-47, una de las armas más usadas por los terroristas en todo el mundo e ilegal en Austria. Desde el Gobierno y la Policía austriaca se ha pedido a los ciudadanos que no difundan imágenes y fotografía de lo ocurrido, para no «confundir» ni «desinformar» a la población y se ha insistido también en que permanezcan en sus hogares para así facilitar la labor de las autoridades. El centro de la ciudad ha sido declarado ‘zona roja’ y ha sido sitiado por un millar de agentes de la Policía y el Ejército, ha informado el diario austriaco ‘Der Standard’.

Así las cosas, el Gobierno austriaco ha decretado tres días de luto nacional, durante los que las banderas ondearán a media asta, y se ha convocado un minuto de silencio para este mediodía. En los colegios, está previsto que el minuto de silencio se guarde el miércoles en el arranque de la jornada lectiva.

En su comunicado, el Ejecutivo de Sebastian Kurz ha tachado el atentado de «ataque a la libertad y la democracia» y ha prometido que hará todo lo posible para esclarecer lo sucedido.

Asimismo, ha dejado claro que seguirá trabajando «junto con nuestros socios y amigos internacionales para luchar contra el terrorismo y el extremismo». #BREAKING: Reports now of a terrorist attack on a synagogue in #Vienna.


APOYO Y SOLIDARIDAD INTERNACIONAL

Lo sucedido también ha atraído la atención de otros líderes y personalidades. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha compartido un mensaje en Twitter escrito en alemán expresando su apoyo a los austriacos. «Después de Francia, es un país amigo que está siendo atacado», ha lamentado.

«Esta es nuestra Europa. Nuestros enemigos necesitan saber con quién están tratando. No nos rendiremos ante nada», ha concluido el mandatario galo. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha dicho estar «consternada» y «entristecida» por el «brutal ataque».

«Europa está del lado de Austria con total solidaridad. Somos más fuertes que el odio y el terror», ha dicho en Twitter. Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha expresado su «más sentido pésame» a las familias de las víctimas, así como la «condena enérgica» de los hechos, al igual que el primer ministro italiano, Guiseppe Conte, o el británico, Boris Johnson, quienes se han solidarizado con las autoridades y el pueblo austriaco.

El candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, también ha hecho referencia a lo sucedido en su cuenta de Twitter, en donde ha escrito que «las víctimas y sus familiares» ocupan un lugar en sus oraciones y en las de su esposa, Jill Biden. «Todos debemos permanecer unidos contra el odio y la violencia», ha dicho.

El Gobierno de Venezuela del presidente Nicolás Maduro también ha querido expresar su «firme condena» contra estos atentados y su apoyo a las víctimas, a la vez que ha promovido, en palabras del ministro de Asuntos Exteriores, Jorge Arreaza, «la paz, la sana convivencia y el respeto entre hermanos de todas las religiones, en cualquier lugar del mundo».