La Secretaría de Educación Pública del Estado y la Unidad de Servicios Educativos del Estado de Tlaxcala (SEPE–USET), manifiestan la disposición de entablar un diálogo con los trabajadores que mantienen tomadas las instalaciones de oficinas centrales.
El acercamiento tendrá que ser de respeto y basado en la legalidad para atender las peticiones de los trabajadores, sin ceder a presiones infundadas.
El cierre del inmueble se registró la mañana de este jueves, como medida de presión para remover al titular de la Contraloría Interna, Edmundo Vázquez Jose, por supuestas irregularidades en el ejercicio de sus funciones.
Sin embargo, no existen argumentos legales y de prueba para la remoción del funcionario, de acuerdo con el dictamen emitido por la Secretaría de la Función Pública (SFP), luego de una investigación del caso denunciado por las y los trabajadores presuntamente afectados.
Además, se documentó el incumplimiento de las obligaciones de servidores públicos del área.
Ante las acciones de los trabajadores, el departamento de asuntos Jurídicos de la USET, interpuso una denuncia contra quién o quienes resulten responsables.
Hasta el momento prevalece la negativa de abrir el inmueble, pese a un primer acercamiento que tuvo el área jurídica de la dependencia con los quejosos.
El secretario de Educación Pública del Estado, Homero Meneses Hernández, refirió que el cierre de oficinas centrales no es la solución a los conflictos, ya que debe privilegiar el diálogo y los acuerdos.
Reiteró que prevalece la disposición de atender cualquier inconformidad, siempre y cuando sea en un ambiente de paz y apegados a los lineamientos legales, sin condicionamientos y presiones.
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