Las cárceles de Puebla y Tlaxcala obtuvieron calificaciones de 5.35 y 6.37 en una escala de 1 al 10 sobre las condiciones para garantizar el respeto a los derechos humanos de las personas privadas de la libertad, de acuerdo con el Diagnostico nacional de supervisión penitenciaria 2023 de la Comisión de los Derechos Humanos (CNDH).

La Comisión evaluó los 19 centros penitenciarios de Puebla y las tres cárceles de Tlaxcala, a través de cinco principales rubros divididos en indicadores y subindicadores sobre las condiciones mínimas que deben existir en un Centro, según los criterios constitucionales sobre el tratamiento de las personas privadas de la libertad y sus condiciones de internamiento, a efecto de procurar una estancia digna y segura para alcanzar su reinserción social. 

Al respecto, Puebla obtuvo una calificación 5.35 debido a que la CNDH detectó deficiencias en los servicios de salud, condiciones de sobrepoblación y hacinamiento, deficiencias en la alimentación y en la atención a las personas adultas mayores y con discapacidad. 

Otras de las deficiencias de los centros que impiden la reinserción social de las personas privadas de la libertad y su estancia segura con apego los derechos humanos son la falta de programas de atención para las adicciones, canales de denuncia de violación de derechos humanos, el autogobierno y mecanismos legales que les ayuden a garantizar procesos judiciales expeditos durante su estancia en cárceles. 

Las calificaciones más bajas las obtuvieron las cárceles de Puebla con 4.94; San Pedro Cholula 4.85; Zacatlán 5.05; Teziutlán 4.81; Acatlán de Osorio 5.06; Libres 3.82; Huejotzingo 3.66; Tepeaca 4.33, Tlatlahuitepec 4.93; Zacapoaxtla 4.65 y Tetela de Ocampo 4.57.  

Por su parte, los tres centros de reinserción social de Tlaxcala observaron falta de normatividad interna y de personal, así como deficiencias en los servicios de salud y alimentación; problemas de hacinamiento y sobrepoblación y falta de materiales para la higiene y atención médica. 

Además, la CNDH detectó que no hay mecanismos para imponer sanciones disciplinarias, hay insuficiencia de personal de seguridad y custodia, y falta de mecanismo para denuncias sobre actividades ilícitas adentro de los centros; en la entidad fallan los mecanismos de reinserción social, como la falta de prácticas educativas y culturales, además de una mala clasificación de las personas privadas de la libertad. 

Las calificaciones para los centros de Tlaxcala son las siguientes: el Centro de Reinserción Social de Apizaco obtuvo una calificación de 6.61; el centro de Reinserción Social de Tlaxcala de 6.03 y el Centro Femenil de Reinserción Social de Tlaxcala de 6.47.

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