El gobernador aseguró que se ha buscado fortalecer el tejido social en la entidad.
Alrededor de mil 800 menores que habían abandonado sus escuelas en los municipios del triángulo rojo, para fungir como vigías de los grupos dedicados al robo de hidrocarburo, han vuelto a las aulas, sostuvo el gobernador José Antonio Gali Fayad.
En el marco del Maratón Internacional de Puebla, recordó que al inicio de su administración se habían contabilizado a tres mil niños y adolescentes que trabajaban como halconcitos a cambio de 12 mil pesos mensuales, según se señaló en su momento.
Gali Fayad aseguró que ante esta situación, no sólo se articularon estrategias en materia de seguridad, sino que se buscó reconstruir el tejido social con acciones sociales, deportivas y de esparcimiento que llamaran la atención de los más jóvenes.
“Hay tantas cosas tan negativas que están pasando en el país, en todos lados, la desigualdad, la desintegración familiar por la delincuencia; por eso intentamos atrapar a los jóvenes para darles a saber que estas actividades son las que unen a la familia y regresarlos a la educación”.
Plantea Gali continuidad del programa “Raíces” Por otra parte, el gobernador informó que se ha planteado la continuidad y crecimiento del Programa «Raíces de Puebla», que apoya con pasajes aéreos a familias separadas por la migración, para reunirse de nuevo.
Indicó que la intención es que la siguiente administración no sólo continúe con el proyecto sino que logre un incremento de recursos para que cada vez más familias puedan reencontrarse, aunque sea por unos días. Mencionó que a su llegada al gobierno, se enviaba a 100 personas cada año a los Estados Unidos para reunirse con sus familiares y en los últimos dos años, esta cantidad creció a una centena cada seis meses.
Sin embargo, destacó la necesidad de que estos traslados se realicen de forma humanitaria, ya que en otras entidades se hace con viajes en autobús; lo que, dijo, afecta a los viajeros que, en muchos casos, son personas de la tercera edad.