Matías Rivero Marines señaló que esta marginación se vive más en lugares como San Miguel Canoa y San Andrés Azumiatla, por falta de servicios públicos básicos
Cerca de 600 mil personas en el municipio de Puebla viven con carencias alimentarias y económicas, mientras que 80 mil sufren pobreza de distintos tipos, según estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), del Consejo Nacional de Población (Conapo) y del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), reveló el secretario de Bienestar Social y Participación Ciudadana del Ayuntamiento, Matías Rivero Marines.
El funcionario señaló que esta marginación se vive más en las juntas auxiliares, como San Miguel Canoa y San Andrés Azumiatla, donde se sufre falta de servicios públicos básicos como acceso al agua potable, electricidad y drenaje, al igual que la falta de un salario o vivienda digna.
“En el segmento de pobreza hay distintos niveles, como dije, en Puebla tenemos personas con alguna carencia distinta y alrededor de 80 mil personas con pobreza de distintos tipos. Tenemos distintos segmentos, tenemos personas que no tienen acceso a servicios públicos, que no tienen a un salario suficiente y bastante para la manutención de su familia, personas que no tienen viviendas dignas”, reveló.
Por ello Rivero Marines señaló que la dependencia a su cargo y la Secretaría de Movilidad e Infraestructura destina obras de infraestructura básica y recursos federales a estas zonas de alta marginación.
“Estamos destinando obras de infraestructura social básica por parte de la Secretaría de Infraestructura y de la que llevo de titular en dos vertientes: recursos federales para aquellas zonas que son de alta prioridad. A estas dos juntas auxiliares vamos a destinar los esfuerzos en temas de biodigestores, captadores pluviales, electricidad y drenaje, estos son los programas que próximamente vamos a destinar”, detalló.
Afirmó que Bienestar Social y Participación Ciudadana aplicará por sí misma 8 millones de pesos a captadores pluviales y biodigestores, mientras que, del Fondo de Infraestructura Social Municipal (Fisem), “son 240 millones de pesos lo que se ejerce y de ahí se hace la división, 70 por ciento para obra pública y 30% para obra básica que abarca captadores pluviales, piso firme, cuarto extra, electrificadores y drenajes que son las peticiones que más han recibido de drenajes”.