Y es que la cámara calculó en 5% la caída de las ventas de sus afiliados con el decreto emitido por el mandatario para prohibir la venta de bebidas alcohólicas.

«Donar sus onerosos salarios de hasta 93 mil pesos”, pidió la Canirac al gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, como también a sus secretarios, además de abstenerse de emitir nuevos decretos que laceraren aún más los bolsillos de los comerciantes.

De acuerdo con un comunicado, la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac), Olga Méndez Juárez, calculó en cinco por ciento la caída de las ventas de sus afiliados con el decreto emitido por el mandatario para prohibir la comercialización de bebidas alcohólicas en botella abierta y al copeo.

«En Canirac creemos innecesario el decreto emitido el 17 de abril, toda vez que los restaurantes que representamos ya no reciben grandes cantidades de comensales, además de respetarse el espacio de 1.5 metros entre las mesas, por lo que se limita el riesgo de contagios de Covid-19. Tenemos gel antibacterial y desinfectamos los espacios con frecuencia».

Por lo anterior, exhortó a Barbosa Huerta a agilizar la entrega de créditos a la iniciativa privada y se sume a la campaña: “Esta vez, yo invito”, la cual trata de recaudar vía online 14 millones de pesos para cubrir las necesidades alimentarias de los trabajadores del gremio.

«Pedimos al gobierno estatal sensibilidad ante los efectos del Covid-19 y, además de dar agilidad a los créditos y apoyos que se han anunciado para el sector empresarial, solicitamos una ayuda urgente para que el gobernador y sus colaboradores se sumen a aportar a las personas que están en pausa laboral forzosa», manifestaron.

Para Méndez Juárez, el decreto de referencia carece de elementos que justifiquen sanciones para quienes comercialicen bebidas alcohólicas abiertas, que van de 15 días a un año de prisión, o multas de uno a 10 días de salario (123.22 pesos hasta mil 232.2 pesos), por lo que se pide reconsiderar la decisión.

«La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados capítulo Puebla, recuerda a la autoridad que, por la emergencia sanitaria del Covid-19, este giro redujo ventas hasta en un 90 por ciento respecto a la misma temporada de años anteriores. Ahora, con la prohibición de vender bebidas alcohólicas abiertas, las ventas caerán otro 3 a 5 por ciento», detalla el comunicado.

Asimismo señalaron que una de las desventajas de frenar el consumo de bebidas alcohólicas abiertas, los afiliados a Canirac observan una reducción de ingresos fiscales, toda vez que el 4.5 por ciento de la recaudación anual de impuestos proviene de la industria cervecera.

«Por la contingencia hay 14 mil meseros, lavalozas, cajeros, chefs, recepcionistas, administrativos y ayudantes que carecen de recursos económicos para que ellos y sus familias subsistan. Suman 56 mil afectados, tomando en cuenta que, de cada trabajador, dependen un promedio de tres personas más», detallaron.

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