La manifestación pacífica partió desde la normal rural «Benito Juárez» de Panotla con la consigna de poner un alto al “desprestigio de las normales”
Cerca de 800 trabajadores de la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), tuvieron que abandonar sus labores este lunes tras el riesgo de quedarse retenidos por la advertencia de alumnas de la escuela normal rural “Benito Juárez” de Panotla, de tomar el edificio en su protesta por el presunto incumplimiento de varios acuerdos relacionados con la mejora educativa, de infraestructura y matrícula escolar.
La manifestación pacífica partió desde dicha escuela hasta llegar a la capital tlaxcalteca, a la SEPE-USET, con la consigna de poner un alto al “desprestigio de las normales”.
Antes de la manifestación, de forma anticipada una representación de las normalistas acudió a la USET para reunirse con el secretario de educación pública, Homero Meneses, para entregar su pliego petitorio.
Por ello, autoridades estatales blindaron algunos inmuebles emblemáticos de la entidad para evitar que fueran vandalizados, además de rodear las escalinatas con vallas metálicas, proteger el quiosco de la ciudad, y retirar las letras monumentales del parque capitalino.
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Este lunes la representación de normalistas y la autoridad educativa analizaron el pliego petitorio.
Este fin de semana, las alumnas de la normal recordaron con una serie de actividades la denominada “lucha” a favor de estas instituciones además de preparar su pliego petitorio que exigen sea analizado.
Desde hace algunos días, a la normal rural de Panotla llegaron jóvenes de escuelas normales de otros puntos del país para respaldar este movimiento.