María del Rayo Mendoza Farfán renunció a la Dirección del Centro de Readaptación Social (Cereso) de San Miguel tras dos años y medio de haber desempeñado el cargo en medio de acusaciones por supuestos abusos de poder.
Además, su administración también fue señalada por permitir un monopolio en el control de ventas de alimentos a los internos, así como otras situaciones que habrían sido el móvil de atentado del que la exfuncionaria fue víctima y del que salió ilesa el pasado 6 de marzo.
De acuerdo con El Sol de Puebla, su renuncia se debe a que su licencia en la la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) para dejar por un tiempo su labor como agente del Ministerio Público, ha finalizado.
Trascendió que en su lugar entrará el abogado y jefe del Departamento Jurídico del citado reclusorio, José Rubén Rojas Estévez, con experiencia en temas penitenciarios.
Sin embargo, ninguna autoridad o dependencia había oficializado ni la salida de María del Rayo, quien presuntamente regresaría a su labor como Ministerio Público, ni la llegada de Rojas Estévez al puesto.
Las fuentes agregaron que antes de su salida, Mendoza Farfán autorizó el traslado de varios internos considerados como de alta peligrosidad al penal de mediana seguridad de Tepexi de Rodríguez.
En enero de 2022, María del Rayo Mendoza Farfán fue nombrada en el cargo tras el escándalo del bebé Tadeo.
Las quejas contra el actuar de Mendoza Farfán no tardaron en salir a relucir, pues familiares de internos, de manera anónima, la acusaron de hacer negocio dentro del Cereso.
También se señaló una supuesta permisividad de robo de medicamentos, así como la operación y desempeño en el área de enfermería de gente que no estaba capacitada o que incluso no cumplía con el perfil profesional.
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