De los 15 infantes, 10 se encuentran junto a sus madres en el penal de San Miguel en el municipio de Puebla, entre ellos tres bebés.
A propósito del 10 de Mayo, en Puebla hay 15 madres viviendo en cárceles del estado con sus hijos, cifra que significa el 2.2 por ciento de las 660 mujeres que están recluidas por cometer algún delito.
Hasta el 31 de marzo, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) reportó ante la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) que hay 7 niñas y 8 niños viviendo con sus madres en algunas de las cárceles estatales, la edad de los hijos de las reclusas van de los 5 meses y hasta los 4 años con dos meses.
De los 15 infantes, 10 se encuentran junto a sus madres en el penal de San Miguel en el municipio de Puebla, entre ellos tres bebés de 9 meses de edad.
En el Cereso de Cholula se encuentra una niña de 2 años y 8 meses; la misma edad que tiene un niño que está junto con su madre en el penal de Zacapoaxtla.
Mientras que en Huauchinango hay una niña de 10 meses; en Ciudad Serdán un bebé de 6 meses y en Tepeaca una menor de apenas 5 meses de edad quienes nacieron o llegaron con sus madres a dichas cárceles.
Las mujeres que permanecen recluidas con sus hijos en las cárceles poblanas tienen entre 20 y 41 años de edad.
En 2020, la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla emitió la recomendación 25/2020 a la SSP en la que pedía realizara las gestiones administrativas y presupuestales pertinentes para que el penal de San Miguel cuente con personal especializado en pediatría, neonatología, estimulación temprana, educadoras o puericulturistas, a fin de garantizar la atención profesional especializada para los menores quienes viven con sus madres privadas de la libertad, en ese centro Penitenciario.
Sin embargo, se desconoce si las autoridades cumplieron a cabalidad dicho llamado.