El agua arrastró con al menos 15 borregos, aves de corral, caballos y burros que murieron ahogadas.
A casi una semana de la barrancada en la comunidad de la “Zacatonera” en el municipio de Tlachichuca, las familias damnificadas continúan pidiendo apoyo del gobierno de Puebla, pues perdieron todo su patrimonio.
El pasado 5 de julio, las lluvias intensas en la región provocaron el desbordamiento de una barranca en la zona de la Zacatonera, por lo que el agua arrastró con al menos 15 borregos, aves de corral, caballos y burros que murieron ahogadas.
Además el agua y lodo ingresó a cerca de 20 viviendas y destruyó los cultivos en los que quedaron piedras de la barranca.
Al día siguiente maquinaria realizaba la limpieza de caminos y casas, el edil Miguel Morales Zenteno declaró que el ayuntamiento repondría los borregos muertos o les daría a los propietarios el equivalente en efectivo, incluso dijo que antes de terminar su gestión buscaría reubicar a las familias afectadas.
Posteriormente, medios de comunicación, vecinos y el edil electo acudieron a la Zacatonera a entregar ropa, alimentos, cobertores y demás apoyos a los damnificados.
Sin embargo, estos no han sido suficiente, pues todas sus pertenencias –ropa, cobijas, camas, muebles, comales–se las llevó el agua y sus viviendas con techos de láminas quedaron destruidas.
Asimismo, temen desarrollar enfermedades respiratorias y estomacales por las condiciones en las que viven.
De manera improvisada construyeron un refugio donde varias familias se resguardan del clima, mientras rehabilitan sus hogares.