Este miércoles, las autoridades federales revisaron las rutas de evacuación en el estado de Tlaxcala.
El Centro Nacional para la Prevención de Desastres (Cenapred) catalogó la explosión registrada la noche del martes en el Popocatépetl, como una «erupción vulcaniana» que provocó una fumarola de tres kilómetros de altura.
Este tipo de comportamiento se caracteriza por ser violento, según explicó una descripción difundida recientemente por la Unidad Operativa de Protección Civil en la Angelópolis respecto a los tipos de erupciones en el mundo.
Dicho gráfico detalla que las erupciones vulcanianas están acompañadas por una gran cantidad de cenizas, bloques, vapor y bombas; esto último, en relación a los fragmentos incandescentes arrojados a dos kilómetros de distancia sobre las laderas del coloso.
El reporte del monitoreo volcánico destacó igualmente, que el episodio de este martes se registró sin estar acompañado o antecedido por tremores o sismos volcanotectónicos, que frecuentemente se asocian al movimiento del magma al interior del coloso.
Los datos mencionan que únicamente se tuvo registro de 200 exhalaciones a lo largo de las últimas 24 horas y resaltó que el semáforo de alerta permanece en amarillo fase 2.
Tras la erupción que cimbró a varios municipios aledaños al coloso, como Puebla capital o Atlixco, el Comité Científico Asesor del Cenapred sesión nuevamente, para revisar el comportamiento interno del Popocatépetl.
En la reunión se evaluaron las recomendaciones que se harán al Sistema Nacional de Protección Civil y adicionalmente, el gobierno federal emprendió una revisión a las rutas de evacuación del Popocatépetl en las entidades federativas que comparten al volcán.
Dichos recorridos ya se realizaron en Puebla y Tlaxcala, donde se recorrieron los municipios de Nativitas, Zacatelco, Tepetitla de Lardizabal, Santa Apolonia Teacalco, Tetlatlahuca, San Nicolás de los Ranchos, Santiago Xalitzintla, San Andrés Cholula, San Mateo Ozolco, San Pedro Yancuitlalpan, Nealtican y Calpan.