El bebé no se convertirá inmediatamente en príncipe, ya que ese título deberá ser otorgado por la reina mediante la emisión de una carta de patente.
Meghan Markle, duquesa de Sussex y esposa del príncipe Enrique de Inglaterra, dio a luz a un varón el lunes, el séptimo en la línea de sucesión al trono, quien fue descrito por su orgulloso padre como “absolutamente para morirse”.
El bebé, cuyo nombre aún no fue revelado, nació en la madrugada y pesa 3,2 kilos. Tanto Meghan como el bebé, el primer hijo de la pareja, están sanos y bien, dijo el palacio.
“Cómo hacen las mujeres lo que hacen está más allá de la comprensión, pero los dos estamos absolutamente emocionados y muy agradecidos por el hermoso apoyo de todos”, dijo un sonriente Enrique a periodistas en Windsor, en el oeste de Londres, donde vive la pareja.
“Fue asombroso, absolutamente increíble. Como digo, estoy tan increíblemente orgulloso de mi esposa y, como dicen todos los padres, el bebé es absolutamente asombroso, este pequeño bebé es absolutamente para morirse”, agregó.
Enrique, el nieto de la reina Isabel II, estuvo presente en el nacimiento y Doria Ragland, la madre de Meghan, también estuvo con la pareja en su casa, Frogmore Cottage, en los terrenos del Castillo de Windsor, donde se casaron en mayo del año pasado.
La reina y otros miembros de la familia real estaban encantados con la noticia, dijo el palacio.
La primera ministra Theresa May envió felicitaciones. “Les deseo todo lo mejor en este momento feliz”, dijo a la pareja real en Twitter.
Congratulations to the Duke and Duchess of Sussex on the arrival of their baby boy. Wishing you all the best at this happy time.
— Theresa May (@theresa_may) 6 de mayo de 2019
El padre de Meghan, Thomas Markle, dijo que estaba emocionado por el nacimiento de su nieto y expresó orgullo de que el niño sirva a la familia real británica, según el diario Sun.
“Estoy orgulloso de que mi nuevo nieto nazca en la familia real británica y estoy seguro de que crecerá para servir a la corona y el pueblo de Gran Bretaña con gracia, dignidad y honor (…) Que Dios bendiga al niño y le deseo salud y felicidad, y mis felicitaciones para mi encantadora hija, la duquesa Meghan, y al príncipe Enrique, y que Dios salve a la reina”, declaró.
El bebé es el octavo bisnieto de la reina de 93 años, la monarca con el reinado más largo del mundo, y podría tener derecho a la doble ciudadanía británica y estadounidense, según las normas de nacionalidad.
Sin embargo, el bebé no se convertirá inmediatamente en príncipe, ya que ese título deberá ser otorgado por la reina mediante la emisión de lo que se conoce como una carta de patente.
Albert, Philip, Arthur y James son los nombres favoritos para el niño, según las casas de apuestas.
La familia real británica atrae un enorme interés de los medios y sus miembros más jóvenes, especialmente Enrique y Meghan, son tratados como superestrellas de Hollywood.
A diferencia del hermano de Enrique, el príncipe Guillermo y su mujer Catalina, quienes posaron para una multitud de fotógrafos fuera de un hospital de Londres horas después de que nacieron sus tres hijos, se espera que Enrique y Meghan realicen una sesión de fotos limitada en los jardines del Castillo de Windsor, unos días después del nacimiento.
Para algunos, el nacimiento del niño representará un momento significativo para la monarquía, al convertirse en el primer bebé racialmente mixto en ocupar una posición destacada en la realeza británica, según expertos.
“Es simbólico de una monarquía moderna. Es atractivo para personas de todo el mundo”, dijo la biógrafa real Claudia Joseph. “Podrán identificarse con la familia real como nunca antes”, agregó.