Por otro lado, cuenta con Código de Ética publicado en 2019.
La Universidad Autónoma de Tlaxcala (UATx) carece de Código de Conducta que concentre las normas mínimas que orienten el actuar de la comunidad universitaria y las condiciones de convivencia entre los docentes y las y los alumnos, revela la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
De acuerdo con la auditoría de cumplimiento 2019-4-99029-19-0145-2020, la ASF detectó nueve debilidades de su sistema de control interno durante la fiscalización de los 598 millones 304 mil pesos transferidos a la UATx del subsidio para organismos descentralizados estatales.
Además de carecer de Código de Conducta, la UATx no considera temas sobre ética e integridad ni sobre prevención, disuasión, detección y corrección de posibles actos de corrupción entre sus normas internas y de control.
Por otro lado, la ASF detectó 12 fortalezas, entre ellas destaca que sí cuenta con un Código de Ética publicado en 2019 para todo el personal de la institución, y cuenta con la Defensoría de los Derechos Universitarios encargada de investigar y documentar las posibles violaciones a los valores éticos.
La ASF concluyó que tras la verificación de las instrumentos de control interno de los recursos transferidos, la UATx tuvo una calificación de 60.7 de 100 puntos evaluados, lo que representa un nivel medio en el ejercicio y transparencia de los dineros.
Entre los hallazgos, la auditoría identificó 775 trabajadores a los que se les realizaron pagos superiores al tabulador autorizado en el apartado único del Anexo de Ejecución del Convenio Marco de Colaboración para el Apoyo Financiero y los tabuladores de los contratos colectivos de trabajo por 5 millones 705.9 miles de pesos, sin que la UATx proporcionara la autorización del Consejo Universitario.
Y de los 160 expedientes analizados la ASF detectó dos perfiles que no acreditaron la preparación académica requerida con pagos improcedentes por 988 mil pesos que más tarde fueron solventados.
“En el ejercicio de los recursos, la Universidad registró inobservancias a la normativa del programa, principalmente en materia de servicios personales… que generaron un probable daño a la Hacienda Pública por un importe de 133 mil 200 pesos… se registraron incumplimientos en las obligaciones de transparencia… lo cual limitó a la Universidad conocer sus debilidades y áreas de mejora», concluye el dictamen.