Apuntó que éste tendrá una duración de dos años y es apoyado por la convocatoria para Proyectos de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación.
Como resultado de la participación constante de los investigadores de la Universidad Autónoma de Tlaxcala en convocatorias del país y del extranjero, la UATx, a través del Centro Tlaxcala Biología de la Conducta (CTBC), ejecutará el proyecto: “Análisis de la conectividad funcional entre los Parques Nacionales La Malinche e Iztaccíhuatl-Popocatépetl e identificación de áreas prioritarias para la conservación”, el cual estará financiado por el Fondo Sectorial de Investigación de la Secretaria de Relaciones Exteriores y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), señaló la Dra. Itzel Arias del Razo, responsable del trabajo.
Enfatizó que, la Autónoma de Tlaxcala, coordinará este gran esfuerzo y, aunado a los investigadores de esta Casa de Estudios, estarán colaborando académicos pertenecientes a la Universidad de Stanford, Universidad de Kansas, Universidad de Bath, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Universidad Veracruzana (UV) y Universidad de las Américas Puebla, así como de prestadores de servicio social, prácticas profesionales y tesistas de licenciatura y posgrado.
Apuntó que éste tendrá una duración de dos años y es apoyado por la convocatoria para Proyectos de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación, vinculados científicos y tecnólogos mexicanos en el exterior, cuyo objetivo general es implementar un enfoque que permita identificar áreas clave para mantener la conectividad entre los Parques Nacionales y mitigar así el impacto del crecimiento de la Megalópolis de la Región Centro de México (MRC), integrada por la Ciudad de México y las zonas metropolitanas de los estados de Morelos, México, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y Guerrero.
La especialista de la UATx explicó que, la fragmentación del hábitat en paisajes modificados por humanos, es considerada la mayor amenaza para la biodiversidad a nivel mundial, ya que este proceso consiste en el desmonte de un hábitat continuo (como un bosque) en pequeños fragmentos aislados que quedan inmersos en una matriz de tierras de cultivo, pastizales ganaderos y zonas urbanas.
Este hecho, dijo, es una de las principales amenazas a la integridad ecológica por su efecto en la pérdida de biodiversidad, la degradación del suelo, los cambios climáticos locales, regionales y globales, así como de servicios ecosistémicos, tales como: captación de agua, captura y almacenamiento de carbono, entre otros, además de que estas áreas albergan una gran diversidad biológica, incluyendo a más de 20 especies endémicas, algunas de ellas amenazadas.
Para concluir, la Dra. Arias del Razo indicó que, en los próximos meses, el grupo colegiado se acercará a las comunidades incluidas en la región de estudio para darles a conocer los objetivos y alcances, pretendiendo que los pobladores puedan contribuir al éxito de esta actividad.