Rechazó que sean 27 escuelas las que no han retomado las clases presenciales como lo declaró el líder de la sección 31 del SNTE
Con las clases en la modalidad a distancia que se conservaron en los dos años de pandemia por la Covid19, en Tlaxcala se registró un aumento de vandalismo en la mayoría de las instituciones educativas, aunque eso no impidió que se retomen las clases presenciales, sostuvo el secretario de Educación Pública, Homero Meneses Hernández.
“Nos han robado hasta tinacos, fuimos víctimas del vandalismo durante la época de la pandemia”, admitió.
A la fecha, dijo, son tres escuelas situadas en los municipios de Ixtacuixtla, Chiautempan y Papalotla, las que registran problemas graves en su infraestructura. El resto de las instituciones tienen afectaciones, lo que tampoco implica que exista abandono en las clases presenciales.
De paso, negó que sean 27 escuelas, las que no han podido regresar de manera presencial, derivado del robo del que han sido víctimas, como en su momento lo afirmó el secretario general de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Cutberto Chávez de la Rosa.
“Son menos, quizá tenga otra información, pero de acuerdo con información que tenemos con base a Infraestructura Educativa son tres escuelas que tienen problemas graves de infraestructura; una es el CAM de Ixtacuixtla, otra es una parte de la primaria ferrocarril Tepatlaxco de Chiautempan, ahí si opera la escuela, pero en otro lugar distinto a su edificio, está atravesando la calle, utilizando el edificio antiguo y otra en Papalotla”, explicó.
Del mismo modo, recordó que para atender el problema en las escuelas para este año a través de los programas para la construcción y rehabilitación de escuelas se contempla un presupuesto de más de 71 millones de pesos provenientes del gobierno federal a través del Programa la Escuela es Nuestra.
Así también, en el programa “La escuela es de los Tlaxcaltecas» se pretende alcanzar una meta de 500 planteles para lo cual se invertirán 33 millones de pesos.
Con la puesta en marcha de ambos programas se buscará rehabilitar un total de mil escuelas, el objetivo es que la sociedad estudiantil cuente con espacios seguros.