Los diez trabajadores despedidos por Volkswagen de México acusaron a la empresa automotriz de querer condicionar su recontratación, prohibiéndoles desarrollar actividad sindicales u otras que se consideren como un riesgo para la producción u operación de la fábrica instalada en Cuautlancingo, Puebla.

Durante una conferencia de prensa explicaron que aún están en espera del informe de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), sobre la investigación que emprendió a petición del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del T-MEC, que se activó por una queja formulada contra Volkswagen de México por negar derechos laborales.

No obstante, la empresa alemana, aún sin conocerse el informe de STPS que se debe presentar el próximo lunes 22 de julio, comenzó a aplicar medidas de remediación, entre ellas la publicación de una carta de neutralidad y los lineamientos sobre libertad sindical, con la finalidad de garantizar que se respetan los derechos de los trabajadores.

Adicionalmente, Volkswagen presentó una propuesta de convenio de reinstalación donde se plantea una cláusula que violenta los derechos laborales, pues se condiciona a que una vez que sean reintegrados a su fuente laboral, ninguno podrá realizar actividad sindical u otra que ponga en riesgo la producción o a la empresa.

Según Rita Marcela Robles representante legal de los 10 trabajadores despedidos, esto violenta los derechos laborales y representa una persecución hacia ellos y sus familiares. 

La abogada explicó que la reinstalación de los trabajadores no resuelve la queja, pues lo que se está demandando a Volkswagen de México es por la negación de la libertad sindical y la contratación colectiva.

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