Un Porsche modelo Taycan Cross Turismo protagonizó la curiosa hazaña que tuvo una duración de 33 horas y 48 minutos.
El fabricante alemán de automóviles Porsche volvió a entrar en el Libro de Récords Guinness al ejecutar el mayor cambio de altitud con un coche eléctrico. El equipo realizó un viaje sin precedentes desde las profundidades del subsuelo hasta la cima de una montaña.
Un Porsche modelo Taycan Cross Turismo protagonizó la curiosa hazaña que tuvo una duración de 33 horas y 48 minutos.
El recorrido inició en el punto más bajo de la tierra desde donde se puede conducir un automóvil a profundidades suficientes, en este caso una mina de cobre y níquel llamada Eagle Mine que está situada en Michigan (EEUU) y posee una rampa que generalmente usan los vehículos mineros especializados.
Aprovechando la capacidad todoterreno del vehículo, su altura de manejo elevada, tracción en las cuatro ruedas y luego de un riguroso entrenamiento de seguridad, el equipo pudo acceder a la parte más baja de la excavación a una profundidad de 540,8 metros bajo el nivel del mar.
Una vez medida la profundidad por topógrafos, el equipo inició el largo viaje que los llevaría a través de seis estados hasta su destino final, la cumbre de 4.302 metros de Pikes Peak en Colorado (EEUU).
El equipo de hombres y mujeres, recorrió un total de casi cinco kilómetros en desnivel y 2.274 kilómetros por tierra, deteniéndose solo para recargar momentáneamente las baterías y ascendiendo una cifra récord de 4.842,967 metros desde el punto de inicio en la mina hasta el pico de la montaña.
«Puedes planificar durante meses, desarrollar un cronograma muy detallado, pero al final del día todo se reduce a la ejecución y el clima. No podría haber estado más orgulloso de los esfuerzos de nuestro equipo», declaró el camarógrafo y piloto, JF Musial.
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