El Instituto Belisario Domínguez además analizó la caída de la actividad económica en los estados y su repercusión en el gasto federalizado.
El debilitamiento de la economía nacional provocada por la pandemia contribuyó a que en 2020 la transferencia de participaciones federales a Puebla y Tlaxcala disminuyera 10.6 y 2.6 por ciento a tasa anual respectivamente.
De acuerdo con el “Reporte mensual sobre actividad económica y finanzas públicas” del Instituto Belisario Domínguez, la actividad económica cayó en Tlaxcala 22.6 por ciento el año pasado en comparación con 2019 y -15.9 por ciento respecto al último trimestre del año, comparado con el mismo periodo del año antepasado.
Por su parte, la actividad económica en Puebla cayó 29 por ciento en su variación anual y 27.8 por ciento en el último trimestre del año pasado.
Según el reporte, la economía mexicana enfrentó dificultades con decrementos anuales en la inversión fija bruta, consumo privado, actividad industrial, empleo y con un ligero aumento de la inflación, además de una recaudación menor respecto de lo presupuestado para 2020 que influyó en las trasferencias presupuestadas.
De ese modo, hasta noviembre del año pasado las participaciones federales transferidas a Tlaxcala fueron 2.6 por ciento menos que el transferido en 2019, y para Puebla 10.6 por ciento menos en su variación anual.
Y es que el monto presupuestado para Tlaxcala y Puebla fue de 8 mil 666.5 millones y 37 mil 797.7 millones de pesos, mientras que lo transferido hasta noviembre fue de 7 mil 952.7 millones y 32 mil 730.8 millones de pesos, respectivamente, lo que representa un porcentaje pendiente de 8.2 y 13.4.
Por Ramo, los montos transferidos en enero-noviembre a Puebla crecieron en 0.3 por ciento en el Ramo 33 y 1.9 por ciento para Tlaxcala.