El Ejército se ha convertido en la constructora más grande del país, situación que pone en desventaja a las empresas de este sector
En su visita a Tlaxcala el presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Javier Solares, lamentó que desde el gobierno de México se asignen obras a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), lo que genera una competencia desleal.
Esa competencia es provocada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues el Ejército se ha convertido en la constructora más grande del país, situación que pone en desventaja a las empresas de ese sector.
Lo anterior, no lo podrán soportar las empresas más débiles en cuanto a su economía y capacidad técnica, no van a poder subsistir, consideró en conferencia de prensa.
“Desafortunadamente hay una competencia desleal, la constructora más grande del país actualmente es el Ejército y construye con condiciones distintas a como construimos los constructores que hemos hecho toda la infraestructura del país, la hemos hecho los constructores, no la ha hecho el Ejército”.
Javier Solares, refirió que las desventajas que enfrenta la CMIC con las obras que ejecuta la Secretaría de la Defensa Nacional por encomienda del presidente de México es que, el ejército mexicano no paga el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto sobre la Renta (ISR) y la capacidad de gestión no tiene límites, es totalmente distinta a la de la CMIC la cual se refleja en costos.
Pese a que admitió que el Ejército Mexicano ejecuta obras de calidad, es pertinente que se transparente los montos de los recursos que se invierten, toda vez que los constructores son observados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de manera rigurosa al momento de realizar la obra.
“El ejército no solamente construye, actualmente el ejército tiene muchos cargos, muchas misiones como ellos dicen, transportan las vacunas, combaten al crimen organizado, bueno, tienen muchas responsabilidades”, expresó.