Desde el inicio de la crisis por Coronavirus, en la entidad dos de 100 establecimientos de venta de tortilla han bajado sus cortinas.
Los poco más de 100 afiliados a la Cámara Regional de la Industria de la Masa y la Tortilla (Carit) en Tlaxcala, mantendrán sin cambio el precio del kilo de tortilla en 12 pesos ante la crisis por la emergencia sanitaria ante el nuevo Coronavirus (COVID-19).
Sobre este tema, días atrás la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advirtió que no había justificación para que los industriales de la masa y la tortilla aplicaran un incremento al producto de consumo diario, ya que no había aumentos importantes a los insumos como el maíz blanco, el cual se cosechó de noviembre a enero de este año y hay existencia con más de 16 mil toneladas, por lo que está garantizado el abasto.
Sobre este tema, el presidente de la Cámara Regional de la Industria de la Masa y la Tortilla, Cruz Mora Avendaño confirmó que en Tlaxcala se mantendrá el precio del kilo de tortilla en 12 pesos en las aproximadamente 100 tortillerías afiliadas.
Sin embargo, comentó que los empresarios de la masa y la tortilla han tenido que implementar medidas para enfrentar la crisis que ha generado la emergencia sanitaria provocada por la pandemia, entre ellas está la disminución en las horas de servicio, ahora están cerrando los establecimientos a las 17 horas, para generar ahorros y poder continuar con el servicio.
En los casos más extremos, han registrado el cierre de dos establecimientos en los municipios de Tlaxcala y Zacatelco, para evitar pérdidas, aunque eso significó mandar a descansar a empleados.
También, Cruz Mora llamó a los intermediarios de la venta de maíz a no especular con el precio del grano, y que la Porfeco también los verifique y castigue para evitar incrementos injustificados.
La Profeco advirtió que estarán verificando el precio de las tortillerías y al detectar que hay incrementos injustificados en el precio del producto aplicarán multas de hasta 3 millones de pesos, y de no ser suficiente procederán al cierre del establecimiento y tomar la mercancía y el control de la tortillería.