Esta contracción es casi el doble de la que proyectó el organismo en abril de 2009 con la crisis de las hipotecas de alto riesgo.
México enfrentará este 2020 una caída de 6.6% en su economía, estimó el Fondo Monetario Internacional (FMI), debido a los efectos del coronavirus Covid-19 y menores petroprecios.
Esta contracción es casi el doble de la que proyectó el organismo en abril de 2009 con la crisis de las hipotecas de alto riesgo, cuando esperaba un retroceso de 3.7% al hacer un ajuste a la baja de 3.4 puntos porcentuales.
En el informe de Perspectivas Económicas (WEO) que dio a conocer esta mañana, detalló que el nuevo pronóstico para el 2020 significa un recorte de 7.6 puntos porcentuales respecto al avance del 1% que tenía apenas a inicios del presente año en enero.
Tras la pandemia, el Fondo estimó que la economía mexicana podría tener oportunidad de levantarse en 2021 con una expansión de 3% desde el 1.60% estimado en enero pasado.
En el reporte que se publicó hoy en vísperas de la reunión virtual de Primavera del FMI y el Banco Mundial (BM), advirtió que al igual que con el tamaño de la recesión hay extrema incertidumbre en torno a la fuerza de la recuperación de la economía global.
Lo anterior porque la podría resultar más persistente de lo que su supone en el escenario base, advirtió.
Hizo ver que aunque la enfermedad se ha concentrado más en economías avanzadas, nuevos brotes en países emergentes o de economías en desarrollo podrían obstaculizar aún más cualquier recuperación, e implicaría interrupciones más duraderas para viajar.
En esta ocasión, el FMI no incluyó un reporte ampliado país por país, ya que el informe completo lo dará a conocer en mayo.
Para la economía mundial está anticipando una caída de 3%, es decir 6.3 puntos porcentuales menos del pronóstico en el reporte previo; para el 2021 está considerando una recuperación con un aumento de 5.8% que representa una mejoría de 2.4 puntos porcentuales.
En abril de 2009, el FMI había proyectado una contracción mundial de 1.3%, que para ese entonces consideraba que sería por un amplio margen, la recesión más profunda desde la segunda guerra mundial.
Del grupo de emergentes, afirmó que hoy todos enfrentan una crisis de salud, un choque severo de la demanda externa, endurecimiento dramático en las condiciones financieras mundiales y una caída en los precios de los productos básicos.
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