El deporte no tiene que ser exclusivo de los hombres, expresa Odeth Lailani Ramírez Ramírez, capitana del equipo sub 15
Por las mañanas Odeth Lailani Ramírez Ramírez asiste a la Escuela Secundaria Técnica No. 1 y por las tardes es defensa y capitana del equipo femenil sub 15 de Las Coyotas de Tlaxcala; además, es titular en el equipo de la liga Premier y rompe con los gustos de la tradición futbolera: es aficionada al club varonil Pachuca –“nada de América ni Chivas”-, su jugadora favorita es la delantera y seleccionada nacional Mónica Ocampo del Club Futbol Femenil de los Tuzos y el delantero del PSV Eindhoven de la liga Eredivisie, Irving Lozano.
En entrevista, Odeth Lailani Ramírez señala que el futbol no es exclusivo de los hombres y que “ningún deporte debe serlo”.
La llegada del futbol femenil a México se inserta en un contexto de lucha por la igualdad, la diversidad y el respeto. Con el mundial de futbol femenil de 2016, México aceleró el proceso de apertura, selección de talentos y la creación de la Liga MX Femenil, obligando a este deporte, exclusivo de varones, a romper los esquemas en la cancha de la división de los géneros .
“No solo el deporte es para hombres, deberíamos dejar a un lado el machismo y tomar en cuenta a las mujeres. Las mujeres tienen las mismas capacidades que los hombres y son muy buenas en los deportes, por ejemplo Maya Rivera Carmona de Tlaxcala logró el premio estatal del deporte 2017. Creo que es tiempo de voltear a ver a las mujeres porque también somos muy buenas en el deporte”, señala.
A los 6 años Odeth Lailani Ramírez empezó a jugar e ingresó al equipo de Coyotas Tlaxcala cuando el entrenador Oscar Enrique Flores Vázquez la vio jugar en los torneos escolares en el equipo femenil de futbol de la Técnica No. 1.
“Ahora, por la creación de la liga MX Femenil, esa es una de mis mayores metas, la de algún día poder jugar en ese torneo. Sería bonito participar en otro equipo, mi meta en el deporte es participar en el equipo del Pachuca.”
El equipo recibe ayuda del Instituto del Deporte de Tlaxcala y de la directiva de Coyotes, “aunque el mayor gasto lo realizan los padres de familia”, dice el entrenador Oscar Enrique Flores Vázquez.
“En la medida de lo posible sí nos apoyan, nos debemos a la directiva del club y lógicamente a los padres de familia que cargan con el mayor peso en cuestión económica.”
¿Cuál ha sido el reto en colocar el futbol femenil en Tlaxcala, sobre todo en un contexto en el que las mujeres y niñas sufren discriminación?
“En Tlaxcala, el futbol femenil tiene futuro porque todas las compañeras piensan seguir jugando y las futuras generaciones también, además de que ha habido aceptación de la afición, los directivos y el gobierno. Yo creo que el esfuerzo de las mujeres por colocarse no es de apenas, tiene buen rato que se están abriendo en todos los aspectos no solo en el deporte. En cuestión deportiva sí ha tenido mucho auge y es bueno que se haga y creo que por antecedentes el mayor número de deportistas exitosos son mujeres, entonces yo creo que no tiene por qué dividirse el deporte.”
En el campeonato de 2016, el equipo sub 15 de Las Coyotas fue campeón de la Liga Nacional Femenil de la Federación Mexicana Futbol (FMF); en 2017 calificaron en primer lugar a la liguilla. Sin embargo, la tarde del sábado 19 de abril, la sub 17 perdió 1-0 frente a La Noria del estado de Puebla.
Durante la liguilla las Coyotas se enfrentaron a equipos del Estado de México, Morelos, Guerrero, Ciudad de México e Hidalgo que conforman la región centro de la liga nacional.
“Estamos en la categoría Premier, afortunadamente calificamos a la liguilla y trataremos lo de la temporada pasada, en la copa pasada fuimos subcampeonas. Este año se abrió la modalidad sub 15 y participamos también y nos fue muy bien, calificamos en primer lugar”, refiere el entrenador Oscar Enrique Flores.
La capitana de Coyotas Tlaxcala siempre sonríe y le sobra seguridad. “En Tlaxcala si hay aceptación del futbol femenil, nunca nos han dejado solas como equipo y siempre que hemos pedido el apoyo nos lo han dado, el futbol femenil llegó para quedarse”.