Durante el encuentro de diálogo entre el equipo de transición del presidente electo y el albergue La Sagrada Familia, los testimonios de migrantes en tránsito darán cuerpo a la política pública del próximo gobierno.
En Tlaxcala prevalece la violencia institucional contra los migrantes de tránsito y de retorno. La entidad se ubica como un punto donde es imposible llevar a cabo trámites de denuncia o poder acceder al derecho a la identidad o la justicia.
Asimismo, a lo largo de ocho años, el albergue La Sagrada Familia ha contabilizado 18 ataques con armas de fuego contra migrantes y el acoso de policías municipales y guardias de seguridad de la empresa Ferrorsur contra los sujetos migrantes.
Esos y otros testimonios se llevará Carlos Cruz, integrante del equipo de trabajo del gobierno electo y coordinador de los foros de migración y personas privadas de su libertad, para integrar la relatoría a la agenda del Plan Nacional de Desarrollo del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La tarde de este lunes se llevó a cabo en el albergue La Sagrada Familia de Apizaco el conservatorio con migrantes de tránsito.
Carlos Cruz y Sergio Luna señalaron que los 21 conversatorios recogerán los testimonios de víctimas con el fin de identificar los tipos de violencia contra los migrantes y diseñar las estrategias para garantizar sus derechos.
«Puedo decirte que en Chiapas identificamos que la violencia contra migrantes proviene de grupo delincuenciales de la droga; en el caso de Veracruz la violencia la ejercen las policías estatales y municipales, ahí hay testimonios de violación e incluso de desaparición forzada. En el caso de Tlaxcala lo que persiste es la violencia institucional y los ataques contra los migrantes en su tránsito por el estado», señaló Sergio Luna, representante de la organización Un Mundo Una Nación.
Por su parte, el coordinador de los diálogos señaló que a lo largo del territorio mexicano ha destacado la importancia que tienen los albergues en el cuidado, apoyo y acompañamiento legalmente a los sujetos migrantes.
«Los albergues para migrantes están haciendo una labor de salvar vidas y además de salvar vidas de contener lo que el estado a dejado de contener; en ese sentido ya nos pone como objetivo que tenemos que recuperar el estado».
Los representantes de la asociación civil Un Mundo Una Nación y el albergue La Sagrada Familia, indicaron que una de las conclusiones prácticas fue el tipo de articulación que debe existir entre los albergues, las asociaciones y las instituciones del gobierno federal.
«Quedamos satisfechos porque creemos que se ha avanzado en este procesos de articulación con el próximo gobierno federal, que ha reconocido la importancia de los albergues para funciones que el estado debería cubrir y de la experiencia que las asociaciones tienen para visibilizar y entender el fenómeno migratorio».
Por último, Carlos Cruz señaló que se sistematizarán las propuestas para encuadrarlas en los tratados internacionales y la Convención de Palermo sobre el crimen organizado, a fin de que queden incluidas las políticas de desarrollo, defensa y protección de los derechos de los migrantes.