Aún con semáforo epidemiológico estatal naranja, el pasado viernes el cabildo capitalino avaló la instalación de las carpas
Con un reclamo de comerciantes ambulantes para que los espacios que ocupan en la Plaza de la Democracia durante las ferias sean respetados, la feria del libro se instaló y comenzó actividades en dicha zona.
Aún con semáforo epidemiológico estatal naranja, el pasado viernes el cabildo capitalino avaló, por mayoría de votos, la instalación de las carpas que cada año se instalan en dicha plaza para realizar la venta de libros a bajo costo.
Los vendedores ocuparon los espacios tradicionales y a la oferta de libros sumaron la de ropa elaborada por artesanos, respetando la distancia de un metro y medio entre las filas donde colocaron los puestos.
Al lugar llegaron ambulantes y se inconformaron con la feria del libro argumentando que había ocupado los lugares que ellos en breve necesitarán para vender durante una feria, por lo que fue necesaria la intervención de la Secretaría de Gobernación Municipal.
Tras dialogar con los inconformes, el personal de vía pública disolvió la queja y continúo sin mayor problema la venta de libros.
Es importante recordar que, de acuerdo con el regidor y presidente de la Comisión de Gobernación, Iván Camacho Mendoza, los vendedores de libros deben usar cubrebocas, distribuir gel antibacterial y garantizar la sana distancia durante su actividad.
En su momento, regidores del PAN criticaron que se concediera permiso para la feria, a pesar de que los contagios de Covid-19 van a la alza.