El rector, Luis Ernesto Derbez indicó que también están en peligro las certificaciones

 Están en riesgo Compromisos financieros por el orden de 525.4 millones de pesos, entre ellos la nómina de 1,800 empleados, debido al congelamiento de las cuentas bancarias de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), dijo el rector, Luis Ernesto Derbez Bautista.

En conferencia de prensa negó las acusaciones de desvío de recursos y lavado de dinero que lanzaron en su contra los integrantes del nuevo patronato y afirmó que hasta el día en que las siete cuentas bancarias fueron congeladas había finanzas sanas y 695.1 millones de pesos en ellas.



El rector señaló que a corto plazo la universidad debe pagar 56.5 millones de pesos por concepto de nómina, impuestos y seguridad social, así como 468.9 millones de pesos a instituciones financieras en los próximos 25 días y no tiene disponibles las cuentas para ello.

Además, señaló que el hecho de que el campus haya sido tomado con la fuerza pública el pasado 29 de junio por un nuevo patronato y que se mantenga la presencia de policías armados en él, ha generado una la ola de desprestigio.

De inicio, The Southern Association of Colleges and Schools Commission in Colleges (SACSCOC), informó el viernes pasado que iniciará una revisión a las certificaciones de la universidad y la matrícula de 10 mil alumnos podría reducirse a 9 mil o 9 mil 500.

«El último dato que yo obtuve es que como resultado de esto hemos perdido unos 200 jóvenes que ya habían dicho que ingresaban y que han decidido ya no ingresar, es decir ya tiene un costo».

Sobre las supuestas denuncias en su contra dijo que no tiene preocupación y tampoco ha recibido la notificación oficial de las mismas, sin embargo como rector promovió un amparo que espera sea respetado para revertir los actos mediante los cuales fue tomado el campus.



El rector fue respaldado por empresarios como Gilberto Marín, vicepresidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), quien llamó al gobierno estatal a conciliar entre las partes involucradas en el conflicto legal de la Fundación UDLAP para dejar de afectar a la comunidad académica y al estado.

Dijo que como padre de familia de esa institución lo que menos desea es que la situación en que está el campus desate manifestaciones, ya que por la vía del diálogo se pueden tomar acuerdos.

También estuvieron:  Ignacio Alarcón Rodríguez Pacheco, presidente del CCE Puebla, Ernesto Álvarez Tostado, consejero de la institución, de la Dra. Cecilia Anaya Berríos, vicerrectora Académica, de la Mtra. María del Carmen Palafox Ramos, vicerrectora de Asuntos Estudiantiles, del Dr. Miguel Ángel Méndez Rojas, profesor investigador del Departamento de Nanotecnología e Ingeniería Molecular, del Mtro. Gerardo Rodríguez Sánchez Lara, director académico del Departamento de Relaciones Internacionales y Ciencia Política, así como del presidente del Consejo Estudiantil de la UDLAP (CEUDLAP), Luis Fernando Rosas Ordaz.

ACUSA CAMPAÑA DE DESINFORMACIÓN

Advirtió la existencia de una campaña de desinformación a través de diferentes portales y medios locales que buscan lastimar su imagen y la del cuerpo administrativo de la universidad al vincularlos a través de historias falsas para afectar la defensa que la institución está llevando a cabo contra la invasión e intento de despojo de la UDLAP.

Cuestionó, haciendo eco de las mismas dudas de medios de comunicación y comunidad estudiantil, quienes son las personas que han emprendido estas acciones ilegales y concretó con base en información obtenida que:

• Son un grupo de amigos sin experiencia en la academia o en el manejo de fundaciones que se dedican a los negocios.

• Viven en la Ciudad de México y no tienen arraigo ni en Puebla, ni en sus municipios o sectores sociales.

• No han podido explicar cómo fueron seleccionados por la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Gobierno de Puebla.

Reiteró que la agenda de dicho grupo de interés se ha focalizado en 1) amedrentar con auditorías a modo al personal administrativo de la institución, 2) desconocer a los organismos reguladores externos que vigilan la administración de la universidad como el Consejo Administrativo y el Consejo Empresarial y 3) obtener a toda costa el control de las cuentas de la Universidad.

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