Se inició un «mercado negro» para conseguir el fármaco debido a que en las farmacias especializadas e precio del fármaco aumentó considerablemente.
Entre 150 y 200 pacientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con trasplantes renales, padecen –desde el año pasado– la falta del medicamento Tacrolimus, que les ayuda a aceptar el órgano dañado.
Así lo denunció Beatriz Adriana Rodríguez, presidenta de la Asociación de Enfermos Renales y Trasplantados Puebla, quien explicó que no es un problema provocado por los recortes presupuestales, sino por la intención del laboratorio encargado de proveerlo, de cobrar más por el suministro.
Explicó que ante esta situación, los médicos del IMSS comenzaron a recetar la mitad de las dosis y cuando ya no había más, optaron por cambiar el medicamento; pero en aproximadamente 30 por ciento de estos casos, las personas presentaron rechazo agudo.
Indicó que hasta ahora, sólo el ISSSTEP ha librado la falta del medicamento; pero la situación se ha extendido al ISSSTE, Pemex y hasta los hospitales militares, poniendo en riesgo la salud de los pacientes.
Explicó que algunos pacientes han buscado el medicamento en farmacias especializadas y notaron que el precio del Tacrolimus aumentó de 700 hasta los tres y siete mil pesos; por lo que se ha generado un “mercado negro” alrededor de este fármaco.
Explicó que hay personas que han robado o conseguido el Tacrolimus y lo comercializan a través de Facebook, de forma irregular, en dos mil pesos.
Indicó que por ello, las organizaciones de todo el país se han dado a la tarea de recolectar firmas que serán llevadas al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, el próximo 6 de junio.
Dijo que entre ellas, irán las firmas de 600 personas provenientes de Puebla, Oaxaca y Veracruz, que buscan que se logre un acuerdo y se reinicie el abasto de este medicamento, pues se prevé el riesgo de que las instituciones dejen de cubrir a los pacientes trasplantados.