La comuna capitalina iniciará este jueves las obras de remodelación que incluye intervención del reloj, kiosco y fuente «Motolinia»
A partir de este 29 de marzo iniciarán las obras de mantenimiento del Paseo Bravo en la ciudad de Puebla para sustituir mobiliario urbano, reponer lajas en mal estado, reforzar el sistema de iluminación, además del embellecimiento del quiosco y monumentos actualmente en abandono.
En este sentido, se establece que los vendedores tendrán 55 espacios para venta exclusiva de comida, además que cerca se colocarán mesas y bancas que sirvan de espacios de convivencia. Con ello, quedará prohibida la instalación de tianguis de ropa que se realiza cada fin de semana, así como de otro tipo de puestos.
La Secretaría de Gobernación Municipal (SEGOM) reportó que existen 135 ambulantes en el Paseo Bravo de los cuales 100 no tienen permisos oficiales.
De acuerdo al proyecto presentado por la Dirección de Obra Pública municipal a regidores, la inversión será de con una inversión de 3 millones 200 mil pesos que también servirán para mejorar las áreas verdes afectadas por la presencia del comercio ambulante.
Por su parte, los regidores plantearon que para atender el Paseo Bravo se designen a “guardabosques” que serán los custodios o vigilantes permanentes de la zona con el objetivo de mantenerlo en buen estado.
Aunado a ello, el gobierno del estado iniciará la construcción de ramblas sobre la 13 Sur a la altura del Paseo Bravo, obra que arrancaría el 25 de abril próximo y concluiría el 23 de septiembre, es decir, la obra estaría siendo ejecutada en un tiempo de 180 días naturales.
La remodelación del Paseo Bravo, es parte de la creación del corredor turístico – comercial con la Avenida Juárez. Entre los monumentos que serán atendidos se encuentra el kiosco, el reloj de “El Gallito” y la fuente de Motolinia o de la Fundación.