Invadidas por grietas, hoyos y raíces son un riesgo para quien circula en ella
Las banquetas de la ciudad de Puebla se han convertido en un riesgo para los peatones que las utilizan diariamente, pues son angostas, están invadidas por grietas, hoyos, raíces de árboles, vendedores ambulantes, así como por postes y basureros que obstaculizan el paso de los ciudadanos.
Asimismo, en los barrios las banquetas son inaccesibles para personas de la tercera edad o con alguna discapacidad física, pues en ocasiones son altas y carecen de rampas, por lo que termina resultándoles más fácil bajar al arroyo vehicular para transitar en vez de lidiar con pedazos de escombros alzados.
Tal es el caso del Barrio de Santiago y El Carmen cuyas banquetas por el paso del tiempo se encuentran deterioradas y son demasiadas angostas; mientras que en el Centro Histórico mobiliario urbano dificulta el paso de personas ciegas que corren corren el riesgo de tropezar, pues las huellas podotáctiles se encuentran semidestruidas o en mal estado por la falta de mantenimiento.
Otro problema de las banquetas, son los hoyos que se generan por obras mal hechas, pues existen casos en que estos agujeros han provocado accidentes a los peatones que circulan por la zona, y es que, en su mayoría carecen de la señalética adecuada.
Ejemplo de esta situación, son los hoyos que se encuentran en la esquina de la 13 norte y 2 poniente del Centro Histórico, así como el que se ubica en el acceso a la terminal de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) del circuito Juan Pablo y bulevar Atlixco.
Cabe mencionar que el pasado 21 de octubre un ciclista falleció al caer en una zanja al pie de la ciclopista del Bulevar Atlixcayotl, la cual carecía de señalética pese a ser una obra que ejecutaba una empresa contratada por Agua de Puebla.