Depresión y enfermedades mentales, son los principales padecimientos.
El asilo de ancianos “La Edad de Oro” ubicado en el municipio de Españita, atiende a un promedio de 70 personas de la tercera edad, de los cuales 45 por ciento son mujeres y 55 por ciento hombres, la mayoría son de Tlaxcala pero también reciben a gente de Puebla, Hidalgo, Estado de México y Ciudad de México.
El titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Víctor Manuel Cid del Prado Pineda, comentó que el asilo de ancianos enfrenta precariedades constantes, por lo que requiere del apoyo de instituciones, jóvenes y organizaciones de la sociedad civil, pero sobre todo necesita integrar un equipo en conjunto para asistir a ese grupo vulnerable de la población.
Además, dijo que la situación en salud es preocupante, pues los abuelitos enfrentan problemas como diabetes, inflamación en partes del cuerpo, alzheimer, esquizofrenia, problemas de nutrición, demencia senil, y ahora cáncer.
Pero comentó que el 50 por ciento de la población en el asilo enfrenta problemas de demencia senil así como depresión crónica, lo que afecta su comportamiento y personalidad.
Menos del 6 por ciento recibe atención de sus familiares y el resto vive en abandono medio o total, cuando se refiere a medio es cuando pasan seis meses sin una visita, pero el resto, definitivamente no regresa.
“Lo que buscamos es que el beneficiario no se olvide de sí, que tenga un propósito de vivir, y cuando lo tiene su estancia es amena, armónica y disfrutan el tiempo, uno los objetivos es darles ese propósito y en automático se diluye el olvido”, comentó.
Pero el asilo de ancianos no solo atiende a personas de Tlaxcala, ahí reciben a abuelitos de los estados vecinos como Puebla, Ciudad de México, Estado de México, e Hidalgo.
Son 14 personas que tratan de atender de forma especializada a las personas que se les brinda atención y residencia, desde quienes se encargan de los donativos, chequeos médicos, cuidado y la cocina.