A partir de enero de 2022 podremos acceder a las cubiertas roja y negra y, un poco más adelante, a los otros tres colores.
La PlayStation 5 es y será blanca, y esa es una de las principales novedades de la consola con el diseño más arriesgado de la historia de SONY. La otra, por supuesto, son sus dos cubiertas que forman una especie de alas blancas a los lados de un centro negro bastante estrecho y alargado. Pero los usuarios de PlayStation estaba acostumbrados a una consola negra desde la PS2, y no tardaron ni 24 horas desde el lanzamiento en buscar la manera de cambiar su color.
A nosotros nos gusta blanca…, con lo que cuesta conseguirla, da hasta gusto que destaque en tu salón, casi como un elemento decorativo más. Sin embargo, entendemos el gusto de otros usuarios por lo oscuro. Sony ya lo había solucionado en parte con los dos nuevos colores de DualSense, que además de blanco ya estaba disponible en rojo y negro (bueno, Cosmic Red y Midnight Black). Sin embargo, todas las cubiertas modificada de la PS5 que había en el mercado eran no oficiales, y Sony además las estaba persiguiendo de manera legal para frenar su venta.
Ahora, un año después, ha decidido ir a por todas de manera propia, presentando nada menos que 5 nuevos colores para su consola, a los que se suman DualSense a juego. Olvidándonos por ahora de los nombres espaciales y cósmicos, lo resumiremos en que además del negro y rojo que ya habían aparecido en los mandos, también lo tendremos en azul, rosa y morado.
Aclaramos que no se trata de colores de la consola, la PS5 seguirá siendo y vendiéndose blanca. Sin embargo, a partir de enero podremos acceder a las cubiertas roja y negra y, un poco más adelante, a los otros tres colores. Por supuesto, no será gratis, cada nuevo par de cubiertas tendrá un precio de 55 dólares (que, entendemos, serán también 55 euros). Recordemos que los DualSense, por si queremos comprarlo a juego, superan también los 60 euros en la mayoría de las tiendas.