Durante el presente año, los reportes de todos los tipos de violencia de género crecieron en ambas entidades; violencia familiar y de pareja, las principales
Entre enero y octubre de 2022, el servicio nacional de emergencias 911 recibió 32 mil 237 llamadas de mujeres víctimas de algún tipo de violencia en la región Puebla-Tlaxcala; esta cifra significó un aumento de 23 por ciento respecto al mismo periodo de 2021, año en el que se registraron 26 mil 695, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Un informe del organismo señala que la violencia familiar y de pareja, ambas ejercidas en espacios domésticos, son las principales que se ejercen contra mujeres.
En particular, el Secretariado registró 26 mil 748 llamadas de emergencia al 911 realizadas por mujeres poblanas, una cifra 25.5 por ciento mayor a las 21 mil 305 llamadas registradas el mismo periodo del año pasado.
De estas, 11 mil 817 fueron llamadas de auxilio por violencia familiar; 10 mil 868 por violencia contra la mujer; 3 mil 725 por violencia de pareja; 218 por acoso y hostigamiento sexual; 70 por abuso sexual y 50 por violación.
Con estas cifras se observa que todos los tipos de violencia de género en Puebla crecieron en el presente año y que en promedio cada mes se recibieron 2 mil 674 llamadas al 911, lo que equivale a casi 90 llamadas diarias.
Por su parte, Tlaxcala también dejó de ser un estado seguro para las mujeres; en el periodo enero-octubre se recibieron 5 mil 489 llamadas de auxilio, cifra que aumentó 15.5 por ciento respecto a las 4 mil 750 llamadas recabadas el año pasado.
Esto significa que, cada día, el servicio nacional de emergencia recibió 19 llamadas por algún tipo de agresion. En la entidad, la violencia de pareja superó a la violencia familiar, pues se registraron 2 mil 212 llamadas por ese delito y mil 860 por violencia familiar; además, hay registro de mil 361 casos de violencia contra la mujer; 23 por abuso y hostigamiento sexual; 12 por abuso sexual y 11 por violación.
Destaca que solo las llamadas por violencia familiar disminuyeron apenas 15 por ciento, pero aumentaron en casi la misma proporción los casos de violencia de pareja, acoso y violencia contra la mujer.