Desde de su óptica el ambiente en la industria automotriz no es propicio para un incremento mayor al 11% pues los efectos de la pandemia han sido de mayor impacto para el sector.
La empresa automotriz Volkswagen podría dejar Puebla si continúa la intransigencia sindical en la negociación de incremento salarial y de Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), consideró el profesor, Felipe Carrasco Fernández, académico de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Al analizar el conflicto que se desató ante el rechazo de una mayoría de obreros al acuerdo de incremento de 11% y la sombra de paro, recordó que en otras firmas armadoras instaladas en México se ha llegado a desconocer la huelga o se ha decidido mudar la fabrica a otro estado o país.
Opinó que los trabajadores deben entender que en México el «sindicalismo extremo» ya quedó en el olvido y que las reformas laborales vigentes permite a las empresas prescindir de los trabajadores si así lo consideran en un escenario de huelga.
Para el catedrático es necesario que se recuerde lo que pasó en Puebla con las empresas textileras donde los sindicatos fueron inflexibles, y las empresas decidieron entregar la fabrica en lugar de ceder a las peticiones.
«La gente debe estar consciente de que la época del sindicalismo extremo de los años 80’s ya quedó en el olvido y Puebla tuvo una muestra de lo que podía suceder en casos extremos, “recuerdo la industria textil en Puebla, el famoso contrato ley para la industria textil en algunos sectores de la industria textil, este contrato establecía muchas prestaciones, que en su momento fueron válidas y necesarias, después se convirtieron en obsoletos y poco competitivos los contratos ley para la industria textil, muchas empresas no aceptaron los incrementos salariales, cerraron sus puertas y se fueron del estado”, recordó Felipe Carrasco Fernández.
En la misma mesa de análisis, el profesor Juan Almazán Corona, agregó que tanto la empresa como los trabajadores deben evitar el conflicto y esperar un año para pelear por un mejor arreglo salarial.
Desde de su óptica el ambiente en la industria automotriz no es propicio para un incremento mayor al 11% pues los efectos de la pandemia han sido de mayor impacto para el sector.
Indicaron que los trabajadores deben emitir su voto de manera madura, responsable y participativa, en estos momentos es importante reactivar la economía en Puebla y el país, en caso contrario, la huelga no beneficia a nadie.
Cabe mencionar que este miércoles 31 de agosto se realizará una segunda consulta para aprobar o rechazar el acuerdo salarial y contractual, pero solo será valida para la autoridad laboral federal si participan todos los obreros y que se tenga una mayoría calificada de 50% más uno.
«Los trabajadores sindicalizados deben emitir su voto de una manera, madura, conscientes, pensado en que es necesario reactivar la economía, porque en caso contrario, la huelga a nadie beneficiará», concluyó Almazán.