La necesidad de los padres de enviar a sus hijos a clases ha dado lugar al fenómeno de las improvisadas «escuelas burbuja» que no siguen ningún programa establecido por autoridades educativas
El fenómeno de las llamadas «Escuelas burbuja«, espacios educativos improvisados en casas y áreas comunes irregulares que no siguen ningún programa, creció en Puebla a raíz de la pandemia de Covid 19 e incluso algunos maestros se emplearon en ellas por falta de oportunidades.
La necesidad de los padres de enviar a sus hijos a clases ha ocasionado que muchos alumnos lleguen con rezago educativo a las instituciones, sin poder acreditar los conocimientos de su grado y que los profesores aceptaran trabajar sin ninguna regulación laboral o de prestaciones.
«A raíz del confinamiento causado por la pandemia de Covid 19, padres de familia inconformes con el aprendizaje en línea pero sobre todo ocupados en sus trabajos decidieron mandar a sus hijos a estos sitios y ahora llegan diciendo que vienen de alguna de estas burbujas y nosotros pues tenemos que recibirlos evidentemente porque no le negamos el servicio a nadie, pero claramente son alumnos que no vienen con los documentos oficiales ni con las habilidades que se espera hayan desarrollado en programas educativos de su edad», señaló Javier Osorio, director de una escuela perteneciente a la Unión Poblana de Escuelas Particulares (UPEP) quien en entrevista exclusiva para URBANO Noticias relató como funciona estos sitios.
Las escuelas “burbujas” o también llamadas “ambulantaje escolar” contó, son espacios irregulares que no siguen algún programa educativo implementado por Secretaría de Educación Pública (SEP), en los que se reúnen personas para aprender en compañía de algún maestro.
Estos lugares, detalló, están esparcidos por toda la ciudad y generalmente operan de forma clandestina, pues ocupan cocheras, casas, jardines de fiesta y áreas comunes de fraccionamientos para impartir clases.
“Pueden enseñar en el comedor de una casa, en un jardín con mesitas. Al final también se cuidan porque saben que están fuera del marco de la ley y podrían tener algún problema”, comentó.
Osorio aseguró que estos sitios encuentran en desventaja, ante unas escuelas particulares oficiales que sí cumplen con todos los requisitos del gobierno y la SEP.
Sin embargo, miembros de las escuelas particulares no han hecho denuncias de ello, porque no les corresponde, lo que hace a este «ambulantaje escolar» seguir vigente, sobre todo en niveles básicos.
Hasta ahora se desconoce cuántas «escuelas burbuja» existen en la capital poblana y en dónde están ubicadas, pero según lo relatado por Osorio, se anuncian de boca en boca o a través de redes sociales ofreciendo costos de colegiatura más baratos.