De acuerdo con estas estadísticas, 45% de las personas recluidas en centros de reinserción social estatales se encuentra en prisión preventiva
En Tlaxcala disminuyó la población carcelaria en prisión preventiva de 53 a 45 por ciento y obtuvo calificación de siete en el respeto al artículo 18 constitucional, según la CNDH y el Instituto Belisario Domínguez.
Hasta marzo de 2018, el 45 por ciento de las personas recluidas en centros de reinserción social estatales se encuentra en prisión preventiva, es decir, siguen su proceso judicial privados de la libertad.
El informe sobre «El uso de la prisión preventiva en México» del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República«, señala que en la entidad ha disminuido a casi la mitad el número de indiciados que permanecen en la cárcel en espera de una sentencia absolutoria o condenatoria.
Indica que el 40 por ciento de las personas en estas condiciones tuvieron procesos de más de 2 años, mientras que el 25 por ciento esperó entre seis y un año para recibir sentencia y el 13 por ciento tuvo sentencia en un período de uno y tres meses.
De acuerdo con los reportes oficiales, el número de personas en prisión preventiva siguió una tendencia creciente durante todo el inicio de este siglo, pasando de 64 mil en el año 2000 hasta llegar a los 113 mil en 2014.
Sin embargo, este número comienza a reducirse hasta regresar, durante los primeros meses de 2018, a cerca de 80 mil casos de prisión preventiva.
En el caso de las cárceles de Tlaxcala, pasó de 53 por ciento de la población recluida con procesos judiciales en 2014 a 45 por ciento en 2018, lo que implica una mejora en la administración de la justicia con el 94 por ciento de sentencias condenatorias dictadas en el último año y una calificación de 7 sobre el respeto al artículo 18 constitucional que determinó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).