La autoridad refrendó a 70 integrantes de Comités de Vigilancia Ambiental Participativa (CVAP) de cinco ejidos en Calpulalpan y Nanacamilpa.
Durante la temporada de avistamiento de luciérnagas en las zonas boscosas de los municipios de Nanacamilpa y Calpulalpan, el delegado en Tlaxcala de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Ricardo Heredia Campuzano, informó que reforzará la vigilancia de inspectores federales para inhibir conductas de los visitantes que impacten de manera negativa el ecosistema de la especie endémica.
En el evento de inicio formal de las acciones permanentes de vigilancia para la Temporada de Avistamiento de la Luciérnaga Junio-Agosto 2018, que se llevó a cabo en la zona boscosa, el funcionario, en coordinación con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Secretaría de Turismo del Estado (Secture), y autoridades municipales de Calpulalpan y Nanacamilpa, se refrendaron los nombramientos de 70 integrantes de Comités de Vigilancia Ambiental Participativa (CVAP) de cinco ejidos que tienen como tarea defender el entorno natural donde se ubica el Santuario de las Luciérnagas.
Cabe destacar que los ejidos corresponden a los de San Bartolomé del Monte, San Antonio Mazapa, San Felipe Hidalgo, San José Nanacamilpa y Sociedad Piedra Canteada.
Ahí también mencionó que para fortalecer la vigilancia de manera preventiva en la zona, informó que, durante la presente temporada, habrá presencia de inspectores federales quienes llevarán a cabo recorridos permanentes con la finalidad de prevenir e inhibir diversas actividades que pudieran generar un impacto negativo donde se distribuye este vistoso insecto.
Explicó que ello es necesario porque las luciérnagas que, son insectos endémicos que viven de manera permanente en esta entidad, necesitan ser protegidos durante su avistamiento que se da durante los meses de junio a agosto, temporada en la que se aparean y por eso se iluminan para hacerse notar como parte de ese ritual.
Agregó que para ese fenómeno se siga presentando, es necesario que los turistas y los ejidatarios, procuren la zona natural no realizando actos que vayan en contra del entorno.