En Japón el día de Navidad comen pollo frito del KFC, en Finlandia en Nochebuena se van a la sauna y los griegos ponen veleros en vez de árboles de Navidad.
No todo el mundo celebra la Navidad de la misma manera. Sí que existen muchos puntos en común como el reunirse con la familia y los amigos, hacer regalos, sobre todo a los más pequeños de la casa, adornar casas y calles y comer alimentos especiales.
De acuerdo con Muy Interesante,en Filipinas la Navidad se alarga varios meses, más concretamente los acabados en –bre, es decir, septiembre, octubre, noviembre y diciembre. Ya desde el mismo 1 de septiembre se pueden escuchar villancicos y las calles aparecen engalanadas con luces y decoración navideña.
A muchos kilómetros de tierras filipinas, en Centroeuropa, hay una tradición un tanto oscura dentro de lo brillante que se supone que es la Navidad y es la noche de Krampus, o Krampusnach, en alemán.
Esa noche, anterior al 6 de diciembre, un ser demoníaco con cuerpo de cabra y grandes cuernos sale a la calle en busca de los niños que se han portado mal, los azota con una rama de abedul y se los lleva al inframundo. Uno de los días grandes de la Navidad finlandesa es el 13 de diciembre, cuando se celebra el día de Santa Lucía.
Este día las chicas más mayores de la familia se visten con una túnica blanca y se ponen en la cabeza una corona de velas. De esta guisa sirven a la familia bollos, galletas, café y vino caliente.
En Nochebuena, lo típico es ir a la sauna acompañado de la familia y al cementerio, para recordar a los seres queridos que ya no están. Japón no destaca precisamente por sus celebraciones navideñas y es que solo el 2 % de su población es cristiana.
Una tradición que se ha consolidado en los últimos tiempos es juntarse con la familia el día de Navidad para comer pollo frito del Kentucky Fried Chicken. En este país, el día de Navidad es más una jornada romántica para celebrar en pareja. ¿Sabías que en Bélgica y los Países Bajos su “Papá Noel” viene de España? Así es, y es que Sinterklaas, el equivalente a Papá Noel, pero vestido de obispo viene de España para repartir regalos a los niños. Se hace acompañar por Pedro el Negro, de piel oscura y vestimentas morunas, quien regala dulces y caramelos a los pequeños.