En 1861, Melchor Ocampo, destacado líder liberal, es tomado prisionero por una gavilla conservadora en su hacienda de Pomoca, Michoacán.
Un día como hoy, pero de 1521 se inició por agua y tierra el asedio a la capital del imperio Azteca, en el que participaron más de 100 mil guerreros tlaxcaltecas junto con otros muchos aliados indígenas y un puñado de soldados españoles.
No fue sino hasta el 13 de agosto cuando la ciudad de México-Tenochtitlan cayó rendida. Tlaxcala estaba liberada de sus antiguos enemigos; el cerco que durante tantos años había limitado su expansión estaba roto definitivamente, aun cuando por ello tendría que pagar un precio: su intocable autonomía de nación quedaría sujeta a nuevas reglas y su ancestral cultura sería penetrada por otros principios.
(FUENTE: Ángel García Cook y Beatriz L. Merino Carrión, Tlaxcala, una historia compartida).
1861.– Melchor Ocampo, destacado líder liberal, es tomado prisionero por una gavilla conservadora en su hacienda de Pomoca, Michoacán.
1864.- Maximiliano de Habsburgo es recibido con un Te Deum en Córdova, después de la fría recepción del pueblo de Veracruz el día anterior.