Las fechas aproximadas son fruto de una serie de ecuaciones elaboradas y aplicadas por el científico Jonathan Jiang y sus colaboradores.
Los humanos podrán caminar sobre Marte en menos de 20 años, probablemente para 2038. Además, se estima que antes del fin de siglo, entre 2076 y 2086, también pisarán al menos un satélite de los planetas gigantes, Júpiter o Saturno, según las predicciones que recoge un artículo de dos científicos del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA y un investigador independiente, también de EE.UU.
El siguiente paso en las exploraciones que engloban sus previsiones sería aventurarse en el sistema planetario más cercano, Próxima Centauri (a 4,2 años luz de la Tierra), algo que podría suceder cerca del año 2254.
Mientras, para 2383, las proyecciones reservan la hazaña del primer contacto con otra forma de vida inteligente, tomando en cuenta que el punto más cercano donde los astrónomos consideran probable la presencia de vida compleja está ubicado a aproximadamente 14.000 años luz de la Tierra y no en los destinos mencionados en los plazos anteriores.
Las fechas aproximadas son fruto de una serie de ecuaciones elaboradas y aplicadas por el supervisor y científico principal de un grupo investigador de la Sección de Ciencias de la Tierra del Laboratorio de Propulsión a Chorro, Jonathan Jiang, y sus colaboradores. Su estudio fue publicado recientemente en la revista Galaxies y está disponible en Internet en su versión preimpresa. Es uno de los primeros en poner fuera del área de la ciencia ficción los vuelos a lugares tan distantes como otras estrellas.
Los autores se muestran optimistas sobre la colonización de mundos lejanos, asegurando que «está al alcance de la humanidad», cuya elección —aseguran— constituirá una «respuesta de la Tierra a la paradoja de Fermi», la idea que enfatiza la contradicción entre las estimaciones de una alta probabilidad de que otras civilizaciones inteligentes existan en el universo observable y la falta de evidencia al respecto.
Sin embargo, su previsión sobre el primer descenso tripulado a la superficie de Marte no es tan optimista como el programa chino de exploración espacial, que busca poner a un hombre en Marte para 2033, es decir, cinco años antes de la fecha que propone el estudio.
El máximo responsable de los trabajos de la NASA, su administrador Bill Nelson, dijo hace unos días que tampoco descarta que exista vida más allá de la Tierra, debido a que nuestro universo es «muy grande» y «hay teorías de que podría haber otros universos».