Escenarios y participación de la mujer en la construcción de la democracia a propósito de lo ocurrido en Afganistán
El cambio esencial en este mundo por y para las mujeres lo están conquistando las mismas mujeres como sector de la población desde diferentes trincheras y con diversos escenarios en el mundo. Es sin duda un tiempo de las mujeres y de su visibilidad en entornos desde lo micro como lo es la familia el entorno laboral hasta lo macro como la política.
Los diversos escenarios sociales enmarcan el reconocimiento de un sector de la población que representa poco más del 50 por ciento de los habitantes en el mundo. Ahora bien, los escenarios son diferentes, sabemos de mujeres valientes que han luchado cada una desde sus trincheras, pero, sin duda, hay escenarios en los que se requiere mucha mayor valentía para luchar por espacios más democráticos.
Tal es el caso de Afganistán. Desde que los talibanes tomaron el poder en ese país, vimos circular en redes sociales un video en el que mujeres afganas con cartulina en mano, se enfrentaban confrontaban a los talibanes pidiendo que se garanticen los derechos humanos de niñas y mujeres e hicieron un llamado a la comunidad internacional para promover la autonomía política del país.
Sin duda que este escenario requiere de mucha más valentía por parte de las mujeres que arriesgan su integridad física incluida su vida para luchar por la conquista en igualdad de condiciones.
Lo ocurrido con esta manifestación de un grupo de mujeres hizo que la comunidad internacional y el mundo entero a volteado a ver a este sector que no sólo representan a las mujeres afganas representan a la mujer y su valentía, representa un gran cambio en el mundo en el que se grita que es tiempo de las mujeres. Como resultado tangible de esta manifestación, la Organización de las Naciones Unidas se pronunció y pidió a los talibanes respeto a los derechos humanos.
Y este tiempo de las mujeres, también enmarcado en el claro ejemplo de Afganistán queda demostrado con Angela Merkel, la canciller alemana que recientemente afirmó que la comunidad internacional se equivocó al desestimar como iba avanzando la ocupación de los talibanes y ha dicho que se tiene que dialogar con ellos para preservar los logros que se han conseguido en Afganistán en los últimos 20 años. Habló de logros no sólo en el ámbito de los derechos humanos para las mujeres, habló de todos como agua potable, la reducción de la mortalidad infantil, entre otros.
Habló de los logros desde su papel de canciller de un país que forma parte de la comunidad internacional, es mujer sí pero también es líder de una nación eso va más allá de sexo o género y el desempeño como gobierno. Veamos, con su declaración Merkel asumió su error y el de la comunidad internacional y eso, asumir los errores y afrontarlos, no es fácil verlo en política. Pero además de asumir el error, en el que está hablando con honestidad y valentía también habla de inteligencia porque ha dado respuesta para enfrentar los resultados de ese error y eso habla de una corresponsabilidad de la situación actual; eso tampoco es común verlo en política y lo ha hecho una mujer.
Las mujeres que hemos nacido en escenarios más democráticos, estamos obligadas a seguir construyendo un proyecto de mundo en el que quepamos todas y todos. Creo que el tiempo de las mujeres salta a la vista para cualquier analista de la ciencia política. Pero creo que es el tiempo de las mujeres como sector sí, pero como un movimiento que no excluye; por ejemplo, en México las últimas protestas del 8 de marzo incluían a mujeres que no necesariamente eran activistas del movimiento feminista, mujeres de todas clases socio económicas, mujeres diversas unidas.
En 1953 se realizaron las reformas constitucionales para que las mujeres mexicanas tuvieran derechos políticos como el ejercer el voto, en 2014 se incorporó en la constitución el principio de paridad para abrir espacios a puestos de representación política, candidaturas y cargos en igual número a mujeres y hombres. Y poco a poco se ha ido ejerciendo este principio de paridad.
Ahora toca pugnar por democracia e igualdad en el que no se excluya a mujeres. Se tiene enfrente, en escenarios más democráticos como el de México, un desafío. Reconocer la diversidad y pugnar por condiciones para mujeres que están en todos los ámbitos, dejar a un lado discursos excluyentes en los que no se reconoce la diversidad de ideologías de las mujeres y sumar en esta pugna a hombres reconociendo también su diversidad ideológica.
Twitter: @AlesandraMartin