Dinamarca, Noruega e Islandia suspendieron este jueves la vacunación con ese fármaco.
Expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) están revisando los informes sobre la suspensión, en varios países de la Unión Europea, del uso de la vacuna anticovid desarrollada por la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford, comunicó este jueves un portavoz del organismo a RIA Novosti.
«Tan pronto como la OMS comprenda plenamente lo sucedido, la organización anunciará públicamente y de inmediato sus conclusiones o cualquier cambio en las recomendaciones actuales», declaró.
Varios países europeos, como Austria, Estonia, Letonia, Lituania, Luxemburgo e Italia, han dejado de usar algunos lotes de la mencionada vacuna, mientras que Dinamarca, Noruega e Islandia suspendieron este jueves la vacunación con ese fármaco.
La decisión de esos países se produce, en su mayor parte, tras la aparición de informes sobre la formación de coágulos de sangre en personas a las que se les había administrado ese medicamento.
Por su parte, la farmacéutica afirmó que la seguridad de su vacuna fue ampliamente estudiada en ensayos clínicos en humanos, y que los datos revisados por expertos independientes habían confirmado que el fármaco es en general bien tolerado.
Mientras, la Agencia Europea de Medicamentos subrayó que «actualmente no hay indicios de que la vacunación haya causado estas afecciones, que no figuran como efectos secundarios de esta vacuna», y calificó la suspensión del uso del fármaco de AstraZeneca como una «medida de precaución».
Asimismo, el organismo regulador europeo respaldó la utilización de la vacuna, diciendo que sus beneficios «superan» los riesgos, al tiempo que subrayó que se está llevando a cabo una «investigación completa» respecto a los informes de coágulos de sangre y otros efectos secundarios en personas que la recibieron.
Actualmente, en el mercado de la UE hay cuatro vacunas aprobadas: la de Pfizer/BioNTech, la de Moderna, la de AstraZeneca y la de Johnson&Johnson.